Reflexión sobre la necesidad de cambiar el rumbo de la educación y las características de las profesiones
Daniel Toribio, miembro del Comité Central del Partido de la Liberación Dominicana, externó su preocupación por la cantidad de universitarios que estudian carreras para las que no existe un mercado, o que éste está saturado.
Toribio alertó sobre la importancia de pensar en los más de 562 mil jóvenes que para el año 2017 estaban matriculados en los diferentes centros universitarios de todo el país.
El dirigente político y economista hizo sus planteamientos en un artículo titulado “Los universitarios: una preocupación” publicado en el Listín Diario y en Vanguardia del Pueblo Digital y despachado en un reporte de la Secretaría de Comunicaciones del PLD.
Refiere que promovida por los ministerios de Educación y de Educación Superior, las universidades aplican la Prueba de Orientación y Medición Académica (POMA), con el propósito de determinar cuáles de los bachilleres que procuran entrar a la universidad, o que ya están, requieren nivelación en áreas determinadas del conocimiento y que cuando esa prueba se les aplicó a los 28.000 estudiantes que deseaban estudiar educación, solo unos 13.000 la pasaron.
“Otra prueba que se aplica a los estudiantes que quieren ingresar a la licenciatura en educación es la Prueba de Actitud Académica (PAA) del College Board y solo cinco de cada cien estudiantes que querían estudiar la carrera pasaron ese examen”, explicó.
Considera que la situación es dramática pues según señala el Ministro de Educación para el 2024 solo se necesitará 20.000 docentes nuevos, pero en las universidades están estudiando 60 mil bachilleres. “¿Qué va a pasar con los 40 mil que no tienen plazas vacantes? La incertidumbre originada por la falta de demanda de trabajo y por la calidad, no es solo aplicable a la educación, algunas otras profesiones están ya saturadas, y lo estarán cada vez más, siendo menos demandadas, dado los pensum actuales”.
Apuntó que igualmente sucede en el área de la contabilidad señalando que en la República Dominicana, en el 2017 había más de 113 mil estudiantes que estudiaban en el área de negocios, de los cuales casi 48 mil lo hacían en contabilidad, muchos de los cuales no podrán trabajar en lo que han estudiado, ya que la demanda de este tipo de profesionales tiende a disminuir, y las características de los empleos están muy especializadas.
Toribio explica que la situación de los universitarios y profesionales jóvenes en educación y en contabilidad, puede ser extrapolada a otras carreras, como es el caso de administración de empresas, que en el año 2017 tenía 26,289 bachilleres estudiándola, y mercadeo con más de 21 mil estudiantes.
Sostiene que estas y otras situaciones hace reflexionar sobre la necesidad de cambiar el rumbo de la educación superior y las características de las profesiones que impartimos en nuestros centros de educación superior: “para algunos jóvenes puede ser tarde, pero para muchos otros sería de gran ayuda en su futuro”.