Fue un destacado investigador y autor que se desempeñó como el bibliotecario número 13 del Congreso de Estados Unidos
WASHINGTON, 22 de noviembre de 2018 – /PRNewswire/ — James Hadley Billington —bibliotecario emérito del Congreso de los Estados Unidos, uno de los historiadores rusos más prominentes del mundo e investigador y autor estadounidense destacado que enseñó en Harvard y en Princeton antes de desempeñarse durante 42 años como director ejecutivo de cuatro instituciones culturales federales— murió en paz ayer en Washington, DC, producto de una corta enfermedad, rodeado de su familia. Tenía 89 años.
James Hadley Billington
El Dr. Billington, que se desempeñó como el bibliotecario del Congreso número 13, había sido nombrado por el presidente Ronald Reagan en 1987, designación aprobada por unanimidad por el Senado de los Estados Unidos. Se jubiló como bibliotecario el 30 de septiembre de 2015.
En un período de 28 años, fundó el Festival Nacional del Libro con la primera dama Laura Bush, el Centro y Premio John Kluge por el Estudio de la Humanidad, el Premio Gershwin y el Centro Nacional de Conservación Audiovisual.
Durante su vida dedicada a la investigación y al servicio —durante la cual atendió a todos los presidentes y congresos desde la década de 1960 hasta su jubilación—, el Dr. Billington tuvo una función esencial en la conservación, promoción y difusión del rico patrimonio cultural de los Estados Unidos.
Nacido en Bryn Mawr (Pensilvania) el 1 de junio de 1929, se educó en las escuelas públicas del área de Filadelfia. El Dr. Billington se graduó con las mejores calificaciones en Lower Merion High School y Princeton University, de donde egresó con distinción en 1950. En 1953, obtuvo un doctorado en historia rusa moderna en el Balliol College de la University of Oxford, donde fue beneficiario de la beca Rhodes.
El Dr. Billington recibió 42 doctorados honoris causa, así como la Medalla Presidencial de los Estados Unidos al Ciudadano Ejemplar, la Orden de la Amistad de la Federación Rusa y la de Caballero Francés de la Legión de Honor.
Tras servir en el Ejército estadounidense en la Oficina de Estimados Nacionales durante la administración del presidente Eisenhower, enseñó historia en Harvard University entre 1957 y 1962, y en Princeton University, donde fue un reconocido profesor entre 1964 y 1974.
Entre 1973 y 1987, el Dr. Billington fue director del Centro Internacional International para Investigadores, donde fundó el Instituto Kennan de Estudios Avanzados sobre Rusia, otros siete programas nuevos y Wilson Quarterly.
El Dr. Billington escribió nueve libros, incluido el clásico de historia cultural rusa, The Icon and the Axe (El ícono y el hacha) y The Face of Russia (La cara de Rusia), libro en el que se basó la serie de televisión de PBS.
El Dr. Billington pasó más de 50 años ayudando a los líderes y ciudadanos de los Estados Unidos a comprender mejor la ex Unión Soviética y los estados que la sucedieron, tarea que representó un aporte para que se apreciaran mejor las instituciones y los valores estadounidenses en países que ocupan un tercio del planeta.
Visitó Rusia por primera vez en 1958 y, en 1988, acompañó al presidente y a la primera dama, Ronald y Nancy Reagan, a Moscú para la reunión de la cumbre de Reagan con Mijaíl Gorbachov.
Durante sus 28 años en la Biblioteca del Congreso, el Dr. Billington expandió y mejoró tecnológicamente los espacios públicos del Edificio Thomas Jefferson, que readaptó como centro nacional de exposiciones en el que se celebraron más de 100 exposiciones, muchas de las cuales incluyeron materiales que nunca se habían mostrado en público en los Estados Unidos.
Duplicó el tamaño de las colecciones analógicas tradicionales de la Biblioteca, que pasó a tener más de 160 millones de elementos y supervisó iniciativas de conservación innovadoras. El Dr. Billington promovió la reconstrucción de la biblioteca original de Thomas Jefferson, utilizando fondos privados captados mediante el Consejo de James Madison de la Biblioteca, que él mismo fundó.
El Dr. Billington también fundó el Centro de Liderazgo Open World, que permitió que más de 27.000 líderes euroasiáticos participaran en el proceso democrático y aprendieran de él. Al mismo tiempo, creó una nueva presencia masiva en línea de la Biblioteca del Congreso y lanzó una serie de programas innovadores en la Biblioteca para compartir sus riquezas educativas con millones de estadounidenses y el mundo.
Al Dr. Billington le sobrevivieron su esposa de 61 años, Marjorie Anne Brennan, a quien él describió como su "compañera total indispensable en todo momento y en toda etapa de su vida adulta"; cuatro hijos, la Dra. Susan Billington Harper, Anne Billington Fischer, el reverendo James Hadley Billington, Jr., y Thomas Keator Billington; y 12 nietos.
Declaraciones y testimonios de figuras nacionales e internacionales destacadas que conocieron bien al Dr. Billington:
Declaración de la Sra. Laura W. Bush:
"El expresidente Bush y yo lamentamos mucho que Estados Unidos haya perdido al Dr. James Billington. El Dr. Billington se desempeñó como bibliotecario de nuestro país durante 28 años y estuvo al frente de la transición de la Biblioteca del Congreso hacia la era digital. En 2001, su labor fue esencial en la creación del Festival Nacional del Libro, que ha recibido a cientos de miles de amantes de los libros en el National Mall y en la Biblioteca del Congreso. La pasión que el Dr. Billington tuvo toda su vida por la investigación y por conservar la historia garantiza que los tesoros literarios más preciados de Estados Unidos estén disponibles para las generaciones futuras. El expresidente Bush y yo enviamos nuestras sentidas condolencias a la esposa del Dr. Billington, y a sus cuatro hijos. Se lo va a echar de menos".
Declaración de Nancy Pelosi, líder de la bancada democrática de la Cámara de Diputados de Estados Unidos:
"El fallecimiento del Dr. James Billington es una profunda pérdida para su familia y seres queridos, así como para nuestro país. Durante su prolongada y prolífica carrera, el Dr. Billington se convirtió en un promotor incansable de la historia estadounidense, ayudando a proteger y conservar el pasado más preciado de nuestro país para generaciones de estadounidenses.
"El Dr. Billington fue un funcionario público con un excepcional nivel de inteligencia, dedicación y visión. Durante su mandato en la Biblioteca del Congreso se duplicó la colección de la Biblioteca y comenzó la generación de sus ahora vastos recursos en línea. El Dr. Billington estaba convencido de que los tesoros de la historia estadounidense a su cuidado pertenecían al pueblo y trabajaba con pasión para garantizar que los estadounidenses de todo el país pudieran acceder a estas invaluables colecciones.
"Ya fuera enseñando en Harvard o en Princeton, colaborando con especialistas y académicos, o siendo profesor y asesor de confianza de incontables legisladores, el Dr. Billington era un educador comprometido. Su devoción por ampliar la programación educativa de la Biblioteca permitió a una generación de jóvenes estadounidenses descubrir su amor por la historia e inspirarlos a involucrarse en nuestro gran experimento democrático.
"Nuestro país perdió un verdadero patriota y uno de sus defensores más implacables. La vida y el destacado legado del Dr. Billington han dejado una marca indeleble en nuestra excepcional historia estadounidense; ha permitido que generaciones de jóvenes vieran, experimentaran y aprendieran de la historia que él promovía con tanta pasión. Que sea fuente de consuelo para su amorosa esposa, Marjorie, sus hijos, Susan, Anne, James Jr., y Thomas, y para toda la familia Billington que tantas personas estén apenadas en este momento difícil".
Declaración de la ex secretaria de Estado de Estados Unidos Condoleeza Rice:
"Recibo la noticia de la muerte del Dr. Jim Billington con mucho pesar. Era original… brillante, atento y amable. Estuvo al frente de la Biblioteca del Congreso con habilidad y pasión. Como comentario personal, debo decir que fue un gran modelo para mí como investigador y funcionario público. Su obra atemporal, The Icon and the Axe es literalmente el libro que llevó a esta música frustrada al estudio de la Unión Soviética. Tal fue el alcance de su influencia en la disciplina. Me sumo a sus amigos y colegas en enviar mis condolencias y rezos a Marjorie y la familia Billington".
Declaración de Nina Khrushcheva, profesora de Asuntos Internacionales de The New School y nieta de Leonid Khrushchev, hijo mayor del ex primer ministro soviético Nikita Khrushchev
"El Dr. Billington era una figura tan destacada en los estudios rusos y en el campo de las relaciones entre Estados Unidos y Rusia que su desaparición se sentirá profundamente en las décadas futuras. En su trabajo, ya sea como investigador o como bibliotecario del Congreso, combinó de manera brillante las humanidades y la política, todo para que Estados Unidos comprendiera y apreciara mejor las demás culturas del mundo. Rusia, su área de especialización, tuvo mucha suerte. El libro de James Billington, The Icon and the Axe, fue en sí mismo un ícono para generaciones de rusos y especialistas en Rusia. En los días oscuros de la Unión Soviética, los rusos intentábamos comprender nuestra propia cultura a través del ojo crítico, culto y amable del Dr. Billington. Al mismo tiempo, su abordaje filosófico e histórico sobre el complejo país de las bombas, el ballet y los hermanos Karamazov se transformó en un mapa de ruta para el estudio de la cultura y la política de Rusia para muchos investigadores que siguieron sus pasos. Que su alma descanse en paz".
Declaración de David M. Rubenstein sobre el fallecimiento del Dr. James Billington el 21 de noviembre de 2018:
"Jim Billington fue uno de los funcionarios públicos más brillantes —de hecho, uno de los estadounidenses más brillantes— que tuve el privilegio de conocer. Por su dedicación a nuestro país y —durante las últimas tres décadas de su vida— a la Biblioteca del Congreso, todos los estadounidenses estamos en deuda con él. Jim ayudó a transformar la Biblioteca del Congreso en la biblioteca del pueblo estadounidense… un tesoro nacional a disposición y beneficio de todos los estadounidenses. Todos los que tuvimos la fortuna de conocerlo y trabajar con él lo extrañaremos mucho".