Reinaldo Pared Pérez, secretario general del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) reflexionó sobre la necesidad de procurar un mecanismo de justicia, que viabilice la designación de miembros y dirigentes de esa organización en las instancias gubernamentales.
Pared Pérez hizo referencia a la queja de dirigentes peledeístas en el sentido de que debe mejorar la relación del Gobierno con el Partido.
El pasado fin de semana en una visita realizada a los diferentes municipios de la provincia Independencia, se le presentó al secretario general del PLD la problemática, recordando que en el año 2004 coordinó una comisión de trabajo junto a Lidio Cadet y Cristina Lizardo, la que se encargó de las designaciones acorde a las recomendaciones de la dirigencia municipal y provincial.
“Para la designación de los gobernadores provinciales al regreso del PLD al gobierno en el año 2004, le solicitamos a la dirigencia provincial una terna, para de esa propuesta de tres compañeros o compañeras, el Ejecutivo escogiera el gobernador o gobernadora” explicó Pared Pérez en Jimaní, acorde a una reseña de la Secretaría de Comunicaciones del PLD.
Informó que esa comisión, con currículo en mano, recomendó la designación de diferentes funcionarios en instituciones públicas por recomendación de los organismos.
“Ese procedimiento, que dio excelentes resultados, no se siguió en otras gestiones”, que es donde estriba la queja de la dirigencia peledeísta.
Defendió la forma en razón de que ofrece la oportunidad a los organismos partidarios que le permitirán al Ejecutivo tomar una decisión con justicia.
“Deben ser los compañeros y compañeras de cada una de las provincias quienes propongan las opciones sobre las cuales se decida el Presidente de la Republica en las dependencias gubernamentales en las provincias” dijo Pared Pérez concitando un aplauso de aceptación por quienes asistieron al encuentro en que participó.
Sostiene que un mecanismo de esa naturaleza establece una vía de participación y relación efectiva entre el Partido y el Gobierno y porque además “se recurre a un criterio de equilibrio y justicia, como una forma erradicar la práctica de las designaciones en una provincia que no viven en ellas o se nombran a amigos o familiares sin merito político alguno”.