Por Emilia Santos Frías.-Mujer dominicana, es cierto que hoy somos más modernas, pero también menos felices. Sostenemos una lucha constante entre el deber ser y el querer ser. Por esto, aprovechando el año nuevo quiero alentarte a cuestionarte y hacer el cambio si es necesario, acerca de qué mujer quieres ser?; estás más feliz y satisfecha con tu vida?
Parafraseando a Andina Chelmisnsky, autora de uno los libros más maravillosos que poseo para leer cuando voy de viaje: “Cabronas al borde de un ataque de nervios y cómo %$#@! sobrevivir”, lo único constante en la vida es el cambio, por eso hoy te invito a cambiar. El 2019 es joven para comenzar a hacerlo, anímate!
Que este nuevo año nos sirva para enfocarnos en nuestras metas, abrazarlas y ser felices. El camino no será fácil. Los éxitos buscados, planificados, por los que luchamos y obtenemos, nunca lo son.
Para obtener esta meta del año, es necesario que aprendamos a decir no personas, temas y acciones que nos desvíen de la meta que tenemos planteada y por la que estamos accionando. Con ese no, alcanzaremos la asertividad.
También, es necesario maximizar nuestro tiempo, abrazar a personas y acciones positivas, que aporten a nuestra vida. Es preciso priorizar y ocuparnos mejor de nuestro tiempo, asumiendo de manera oportuna las responsabilidades. Cuando toca, toca!.
Accionar sin precipitarnos, pues para alcanzar el éxito, es necesario mantener la calma, siempre manejando nuestras prioridades: metas. Para ellos, debemos renunciar a ciertas cosas. Identifica tu Talón de Aquiles.
Es necesario que luchemos por nuestras prioridades, sin olvidar el orden de las metas y su relación con nuestras decisiones. Enfócate!
Además, es preciso organizarnos, delegar; aprender nuevos caminos para hacer las cosas, poseer visión para actuar acorde a las metas planteadas y sobre todo tener a Dios en nuestra vida. Él nos apartará de la ira cuando nos invada. Somos simples seres humanos!
La realidad es que cada vez hacemos más y disfrutamos menos, es por ello, que te invito a replantear prioridades, organizar tu mente y opciones, reaprender; aprovechar el tiempo y lo más importante, disfrutar los diferentes matices de la vida. Este hermoso camino llamado vida es maravilloso, sobre todo cuando con ella impactamos a nuestros semejantes de forma positiva.
Anímate, súmate, y juntas alcancemos las metas asumidas en la individualidad y esas que propician cambios sociales a nuestra amada nación!. Esa es mi invitación.