En medio del temor de los residentes en Las Praderas, la Policia Nacional informó este jueves el arresto de dos sospechosos del asalto masivo ocurrido el 27 de febrero en el parque de ese sector del Distrito Nacional.
Los sospechosos son Waldy David González (a) Deivi, y Leonel France Guzmán, ambos mayores de edad, de acuerdo al reporte policial.
La Policía informa que ambos hombres admitieron haberse presentando en el citado lugar donde, a punta de pistola, amenazaron a todos los presentes, incluyendo niños, advirtiéndoles que se trataba de un atraco y los obligó a tirarse al piso.
Fue de ese modo que éstos, en compañía de los tales “Guajiro”, “Jordan” y “Abuelo” (prófugos) despojaron a 11 personas de dinero en efectivo, celulares, documentos personales, entre otras pertenencias.
La comisión del delito ocurrió a eso de las 4:30 de la tarde de ayer, mientras que el apresamiento de los dos hombres en mención se realizó dos horas después, luego de una ardua persecución por parte de los agentes actuantes.
Hasta el momento, han sido recuperados más de cinco celulares, así como documentos personales de algunos de los afectados.
Se trabaja en la búsqueda y captura de los demás participantes para ponerlos a disposición de la justicia junto a los apresados.
El Diario Libre reporta en su portal digital que hoy pocas personas han acudido al lugar de recreación por miedo a ser asaltado.
Asesinan teniente en Yamasá
La Policía Nacional también informó que trabaja en la identificación y captura de dos hombres que anoche ultimaron de un balazo en la cabeza a un segundo teniente del cuerpo del orden, en Yamasá, al que despojaron de su arma de reglamento.
El segundo teniente Richard Severino Laurencio, de 40 años, fue ultimado alrededor de las 8:00 de la noche, próximo a una planta de gas en el kilómetro 18 de la carretera Villa Mella-Yamasá, cuando se desplazaba en una motocicleta CG, roja.
Familiares del oficial ultimado dijeron que sus atacantes fueron dos hombres que portaban armas de fuego, que ocupaban otra motocicleta de datos desconocidos.
En el lugar del hecho, la Policía Científica colectó un casquillo calibre nueve milímetros.
El cadáver del oficial fue enviado al Instituto Nacional de Patología Forense para fines de autopsia.