El presidente de Alianza País indica que el actual conflicto entre médicos y las administradoras de riesgos de salud, una vez más, pone al desnudo las grandes fallas y distorsiones del sistema de seguridad social vigente en el país.
Ha quedado evidenciado el excesivo poder de las aseguradoras. Éstas, por medio de los llamados códigos deciden cuales médicos trabajan y cuáles no; auditan los servicios médicos y deciden sobre los servicios que se pagan o no; son las que finalmente tienen el poder para autorizar servicios médicos, medicamentos, internamientos y estudios.
Tanto poder sin aportar un centavo, recibiendo ganancias de cientos de millones de pesos y sin producir los servicios de salud.
Guillermo Moreno sugiere que la salud no puede ser tratada como una mercancía a la que solo accedan quienes pueden pagar por ella.
“Es momento de que la ciudadanía se plantee exigir un nuevo modelo de seguridad social en el que los actores del mismo sean el Estado y los ciudadanos a través de los centros públicos y privados de salud, en el que se eliminen las ARS como intermediarias financieras que no aportan nada a la producción de salud de la población.”.
“La salud, conforme la Constitución Dominicana, es un derecho fundamental del que dependen la calidad de vida y la existencia misma de las personas, y por lo tanto, es un obligación irrenunciable del Estado garantizarla a todos los dominicanos.”