Jorge Eliú Mirabal, quien lanzó su candidatura a la alcaldía de Salcedo con el apoyo de Ramfis Domínguez Trujillo, desmintió a Miinou Tavarez Mirabal y aseguró que dicha declaratoria carece de un efecto jurídico que impida al candidato presidencial, ejercer actividades políticas en la provincia Hermanas Mirabal.
Eliú Mirabal atribuye lo sucedido a diferencias políticas, más que a temas de historia. “Esta declaración absurda que se ha querido disfrazar de un resentimiento histórico, no es más que un atropello a las libertades públicas que busca restar apoyo a nuestra candidatura a la alcaldía, la cual está de la mano con Ramfis”.
En este sentido indicó que, “ellos dicen que repudian los actos tiránicos, pero lo que sucedió es lo típico de una dictadura. La alcaldesa responde a las órdenes de un personaje oscuro de la política llamado Miguel Vargas, que como todos sabemos es un tentáculo más del PRD”.
Asimismo, aseguró que, “esto no pasa de ser un show mediático, porque en realidad no representa un obstáculo legal para que Ramfis ejerza actividades políticas en nuestra provincia. De modo que, si esta declaratoria es para seguir implantando la dictadura del PLD, no les servirá de nada porque no podrán evitar que se repitan manifestaciones de apoyo masivas, como las que recibimos del pueblo salcendense recientemente.”
De igual forma, aseveró que la declaratoria de persona no grata, en contra del aspirante presidencial viola la Constitución, en su art. 44, que prescribe que: se reconoce el derecho al honor, al buen nombre y a la propia imagen. Toda autoridad o particular que los viole está obligado a resarcirlos o repararlos conforme a la ley. “Por tanto, al vincular a Ramfis a hechos que no ha cometido, infundir el odio, en contra de éste por asuntos con los que no tiene nada que ver, se le está vulnerando este derecho”, enfatizó.
Respecto de lo manifestado por Minou Mirabal sobre que éste no es familia de las hermanas Mirabal, sostuvo el Sr. Eliú sostuvo que: “Dejando de lado que Minou nunca ha hecho vida en Salcedo, sino en la capital, trabajando siempre para el PLD; ella sabe que miente, porque mi abuela, Antonia Mirabal, fue tía de las hermanas Mirabal, por tanto, de su madre: Minerva Mirabal; de ahí que mi padre, Fellito Mirabal, resultara ser primo hermano de éstas. Entonces, deduzca usted cuál es mi relación directa con la familia. Poniendo eso claro, debo recordarle también que mi hermana, Tania Mirabal, fue asistente de ella cuando trabajaba en la