WASHINGTON, D.C. – Hoy, el Congresista Adriano Espaillat (NY-13) votó a favor de aprobar la Ley de Igualdad (H.R. 5). Esta garantizaría que a todos los estadounidenses LGBTQ se les otorguen las protecciones garantizadas por la ley federal de derechos civiles. La Ley de Igualdad extiende las protecciones contra la discriminación a los estadounidenses LGBTQ con respecto al empleo, educación, acceso al crédito, servicio de jurado, financiación federal, vivienda e instalaciones públicas.
"A través de muchas luchas y sacrificios, generaciones de estadounidenses LGBTQ perseverantes han trabajado para forjar un futuro más justo e imparcial para ellos y para todos los estadounidenses", dijo el Congresista Espaillat. “Mientras nos preparamos para celebrar el Mes del Orgullo LGBTQ, es un honor unirme a mis colegas para aprobar la Ley de Igualdad para, finalmente, acabar con la discriminación contra los ciudadanos LGBTQ en Nueva York y en todo el país. Esta legislación histórica reafirma que la libertad emancipada de la discriminación es un derecho civil fundamental que pertenece a todos los estadounidenses, y que ningún neoyorquino o estadounidense debe perder su trabajo, su hogar o vivir con miedo simplemente por ser quienes son o por quienes aman.”
El cincuenta por ciento de la comunidad LGBTQ nacional todavía vive en estados donde, aunque tienen derecho a contraer matrimonio, no tienen protecciones explícitas contra la discriminación en otras áreas de la vida diaria. Solo 21 estados tienen leyes explícitas que prohíben la discriminación basada en la orientación sexual en el empleo, vivienda e instalaciones públicas, y solamente 20 estados tienen dichas protecciones para la identidad de género. En la mayoría de los estados, una pareja del mismo sexo puede casarse un día y ser negados legalmente a un servicio en un restaurante, ser despedidos de sus trabajos o ser desalojados de su hogar al día siguiente. La Ley de Igualdad modifica las leyes federales de derechos civiles existentes para crear un estándar nacional que prohíbe rotundamente la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género.
"En Nueva York, nuestras comunidades son bendecidas y fortalecidas por la belleza y diversidad de nuestros amigos y vecinos LGBTQ", continuó Congresista Espaillat. “Mientras avanzamos y tomamos este paso trascendental, debemos volver a comprometernos a mantener firme nuestra lucha contra el fanatismo, la discriminación y el odio donde sea que se encuentren. Continuaremos asegurándonos de que todos los estadounidenses sean tratados con dignidad y respeto mientras trabajamos para avanzar nuestra nación más y más cerca a su promesa fundamental de igualdad sin prejuicios".