Por Thais Antoniolli, presidenta de PR Newswire/Cision Latam.- SÃO PAULO, 26 de agosto de 2019 – /PRNewswire/ — El título de este artículo de mi autoría es una provocación. Después de todo, es indiscutible: la transformación digital es la nueva normalidad. No es algo que sucederá en el futuro.
Ya está aconteciendo y la empresa que no se adapte a esta nueva realidad apenas podrá permanecer en la memoria de las personas. En la actualidad, todas las empresas quieren ser una "tech company" y las empresas de comunicación también forman parte de la lista. Pero, ¿exactamente de qué modo la transformación digital por un lado está impactando e influyendo en la actuación de la prensa y por el otro en la comunicación? Eso es lo que voy a detallar a continuación. ¡Acompáñeme!
Adiós a la vieja prensa
En los últimos años, los medios de comunicación se modernizaron migrando sus modelos de negocios al ámbito digital. El papel, tan apreciado por las fuentes, gradualmente cedió el paso a los sitios Web y a presencias en los más diversos medios sociales. Con el tiempo surgió un aliado en este escenario: la analítica (analytics), que llegó para cambiar de nivel a la prensa y atrapar a la audiencia. Y esto no solo en los medios de comunicación on-line, sino también en las emisoras de radio y televisión. Ellas también están transitando por un proceso de transformación. En este nuevo universo, los lectores y los telespectadores son quienes mandan e ignorarlos puede resultar fatal.
En este contexto, uno de los mayores desafíos es entender mejor al público. ¿De qué se alimentan? ¿Dónde viven? ¿Qué tipo de contenidos consumen y cómo? Es algo casi filosófico y la respuesta no siempre es la suma de 1 + 1.
Así y todo, las empresas descubrieron que los datos resultan claves en este contexto, pero no siempre están al alcance de las manos de quien ofrece el contenido. Si usted quiere saber más acerca de este tema, recientemente escribí un artículo sobre el poder de las métricas. Es por eso que, por ejemplo, HBO y Disney que hasta ahora disputaban la soberanía de Netflix, están creando sus propias ofertas de streaming.
Otras empresas están apostando fuerte al pay wall, un sistema de suscripción que permite a los internautas acceder a contenidos restringidos para entender mejor a su audiencia. Otras están en vías de convertirse en una Edtech, usando al contenido para mezclarlo con los temores de la audiencia y haciendo que se adquieran suscripciones para saber cómo navegar y saber todo sobre el tema X o Y.
¿Y la comunicación?
Normalmente, cuando pensamos en la transformación digital apelamos a tecnologías que están de moda, como la inteligencia artificial (AI, por sus siglas en inglés), el machine learning y los big data, que ciertamente ayudan a las empresas a avanzar más rápido. Pero estas tecnologías hacen mucho más que aumentar la productividad. También cambian la forma en que nos comunicamos. Es por esto que la comunicación se ve sumamente impactada.
Hasta no hace mucho tiempo, la comunicación interna era prácticamente una dependencia del área de recursos humanos o de marketing. OK, no hay ningún problema con eso. Pero con el advenimiento de la tecnología digital voló, tras pasar por una verdadera metamorfosis, como una mariposa que hasta entonces había sido apenas una larva. La tecnología digital permitió entonces una comunicación más fluida, clara y multicanal. Es difícil encontrar una empresa que no use la comunicación digital, que va mucho más allá del e-mail, para conectarse más eficazmente con sus colaboradores.
¿El resultado? Flujos de trabajo más eficientes, rompimiento de barreras y aumento de la satisfacción de los empleados, acostumbrados a lo digital en sus vidas personales. Y en los próximos años el escenario tendrá aún más contornos. Con estimaciones de mercado que indican que para 2025 los nativos digitales representarán el 75% de la fuerza de trabajo, las comunicaciones probablemente serán más rápidas y más digitales.
La comunicación externa también incorporó nuevas fases. Después de todo, las personas están hoy más conectadas que nunca. Es la era de la hiperconexión. La encuesta Estado de los Servicios Móviles, elaborada por App Annie -una empresa de consultoría especializada en datos sobre aplicaciones para dispositivos móviles- muestra que en 2018 los brasileños pasaron más de tres horas al día usando sus celulares. Este promedio colocó al país en el quinto lugar del ranking global de tiempo dedicado a este dispositivo.
Para las empresas, esto significa que el punto de contacto inicial necesita ser esencialmente el digital y –preferiblemente- el smartphone. Se trata de una comunicación inmediata, conveniente y sumamente personalizada, por medo de chatbots y otros recursos tecnológicos presentes en el dispositivo móvil.
Así como sucede con toda empresa que se está transformando, en el ámbito de la comunicación y la prensa tener, o no, un legado es un factor que resulta crucial en la velocidad del cambio. Sin embargo, ninguna empresa debe considerar a este factor como un impedimento para su evolución. La migración al ámbito digital, apoyada en un propósito, es siempre la mejor manera de superar los desafíos. Solo debe elegir su cereza de la torta.
¿Usted ya eligió la suya? Si está del lado de la comunicación o de la prensa, ya es hora de cambiar. ¿De qué modo está lidiando con esta provocadora e invasiva transformación digital?
FUENTE Thais Antoniolli