La Junta Central Electoral es una abusadora: Dice que, después de cumplir su horario de labores, que abarca desde que ponchan tarjeta a las 8:00 am, hasta que vuelven a poncharla a las 5:00 pm (incluyendo siete horas para comer, llenar crucigramas, chatear, compartir los chismes de la oficina y de la farándula y comentar la novela), los empleados públicos, ya cansados de tanto trabajar, pueden ser acarreados a la campaña del Penco. Dicen los pobres burócratas, en sorda protesta, que eso deben hacerlo los altos funcionarios, que se la pasan firmando papeles, y el Presidente de la República, que sólo hace una visita cada semana.