El Ministerio Público del Distrito Nacional informó que logró que fueran condenados los principales acusados en el caso Maconi, a quienes se les sentenció a cumplir penas que van desde 20 a 10 años de prisión, tras ser declarados culpables por el tráfico de un alijo de 1,570.41 kilos de cocaína, siendo señalado como el cabecilla de esta red delictiva Ernesto Bienvenido Guevara Díaz, alias Maconi.
En virtud de la acusación presentada por el Ministerio Público, el Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional procedió a dictar las penas de 20 años de prisión para Ernesto Bienvenido Guevara Díaz, 15 años contra Carlos Julio Cuesta Féliz y 12 años a Dante Meraldo Medina, quienes además deberán pagar una multa ascendente a un millón de pesos, por su condición de patrocinadores de tráfico ilícito de sustancias controladas.
Mientras que los acusados José Quijada Salazar, Silvio Ibarra Vega y Manuel Escobar Bolaños fueron declarados culpables de asociarse para cometer el crimen de tráfico internacional de drogas, por lo cual a cada uno se les condenó a cumplir la pena de 10 años de reclusión y al pago de una multa de RD$50,000.00.
Las condenas antes descritas constituyen un golpe certero contra el narcotráfico, a la vez que demuestran el firme compromiso del Ministerio Público en perseguir y procurar que sean sancionados todos los que incurren es este delito que lacera a la sociedad, indica la nota remitida a este diario.
El Ministerio Público señaló que los hechos de este caso constituyen una violación a lo establecido en las leyes 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas en República Dominicana y 155-17 sobre el Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo en perjuicio del Estado dominicano.
Se recuerda que el referido alijo de cocaína fue confiscado en la embarcación de carga KALUBA, en el Puerto de Sans Souci, la tarde del 31 de diciembre de 2017, gracias a una acción conjunta del Ministerio Público y la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
Para dar al traste con el referido cargamento de droga e impedir su introducción y distribución en el país, el Ministerio Público y la DNCD iniciaron una ardua tarea de investigación que incluyó la escucha de llamadas telefónicas, labores de inteligencia, vigilancias electrónicas y seguimientos.
Los representantes del Departamento de Investigación de Tráfico y Consumo de Drogas del Distrito Nacional conjuntamente con miembros de la DNCD ocuparon en la embarcación KALUBA 75 sacos de nylon, dentro de los cuales fue encontrada la droga que había sido escondida en un compartimiento secreto del barco.