BEIJING, 2 jun (Xinhua) — China ahora se está acercando más y promete cumplir su objetivo de detener todas las importaciones de desechos sólidos para finales de 2020, como parte de sus amplios esfuerzos contra la contaminación.
El país importó 2,49 millones de toneladas de desechos sólidos en los primeros cuatro meses de este año, lo que significa una masiva reducción de 47,3 por ciento respecto al año previo, indicó hoy martes Liu Youbin, portavoz del Ministerio de Ecología y Ambiente, en conferencia de prensa.
Liu dijo que el ministerio, junto con otras autoridades correspondientes, será incesante en garantizar el logro del objetivo para finales del año.
China empezó a importar desechos sólidos como fuente de materias primas en la década de 1980 y por años ha sido el mayor importador en el mundo, a pesar de su débil capacidad para el tratamiento de la basura. Algunas compañías han lucrado al introducir ilegalmente al país desechos extranjeros, lo que representa una amenaza para el medio ambiente y la salud pública.
El gobierno chino prometió detener esas importaciones para finales de 2020, y ha incrementado el índice nacional de reciclado de desechos sólidos.