Aceptando como incuestionables los reportes que sobre el incremento del número de personas infectadas y fallecimientos por el Covid-19 ofrece a diario el ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas, se podría afirmar que República Dominicana está bajo el castigo de una pandemia letal, que no ha podido ser controlada por las autoridades de Salud y el gobierno del presidente Danilo Medina.
Según esos datos avalados por el gobierno dominicano, pareciera que República Dominicana se encamina a convertirse en el centro de la pandemia del Covid-19 en la región del Caribe de continuar el avance de la letal enfermedad viral en la nación.
Médicos y enfermeras de los centros asistenciales públicos y privados de todo el país luchan cada día sin descanso por salvar vidas de afectados por la pandemia. Pero, siguen en aumento las cifras por fallecimientos.
Las autoridades podrán culpar de la propagación del Covid-19 a una alta proporción de la población, que se niega a cumplir con las disposiciones de prevención, al realizar actividades colectivas, sociales y familiares sin mascarillas y sin cumplir el distanciamiento recomendado para evitar el contagio.
Se cuestiona que el gobierno dominicano desde un principio no aplicó una política de distribución de mascarillas a toda la población, como medida para evitar la propagación del virus, y lo que es peor, ha colaborado la expansión del posible contagio colectivo al permitir que cientos de personas se aglomeren sin protección alguna a recibir artículos comestibles y regalos del candidato oficialista Gonzalo Castillo en su campaña presidencial.
Mas que una efectiva medida de prevención o contención de la enfermedad, y haciendo acopio a la expresión francesa “laissez faire, laissez passer” que significa “dejar hacer, dejar pasar”, el presidente Danilo Medina permitirá el ingreso al país de turistas y dominicanos residentes en el exterior para levantar el sector turismo, en total desplome por la pandemia.
Recientemente, Paola Rainieri, presidenta de la Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana (Asonahores) declaró que “los visitantes extranjeros que lleguen al país a partir del primero de Julio próximo no tendrán que cumplir cuarentena”. Solo por ser turistas.
Si lo que se busca con medidas irresponsables es hacer que República Dominicana se convierta en el centro de la pandemia del Caribe, como lo fue China, pasando a España e Italia y luego a Nueva York, Estados Unidos, desde donde se reportaron millones de muertos e infectados, la facilidad anunciada por Paola Rainieri es la perfecta.
Pareciera que al presidente Medina, a los funcionarios de su gobierno, incluidos los responsables directos del Ministerio de Salud, les importa muy poco la vida y la salud de los dominicanos. Esto así porque en ningún momento han levantado la voz para rechazar o advertir del peligro de permitir la entrada de turistas sin la aplicación de medidas de cuarentena. Y sin establecer públicamente protocolos estrictos en cada centro turístico para saber si hay visitantes infectados por el virus.
Autoridades del gobierno de EEUU informan a diario con mucha preocupación los aumentos records de nuevos casos de Covid-19 en los estados de California, Texas y la Florida. Estos estados son los más poblados y representan el 27.4% de los 328 millones de habitantes de la Unión Americana.
Según reportes oficiales, California tiene un total de 206,844 infectados y 5,868 muertes; Texas 140,173 enfermos con 2,354 muertes, y la Florida ha reportado un total de 122,960 personas infectadas y 3,366 muertos.
Pronósticos gubernamentales dan cuenta que Florida está a punto de convertirse en el centro de la pandemia del Covid-19 para EEUU. Es un estado muy próximo a República Dominicana.
Y es precisamente desde esta zona de EEUU que miles de turistas floridanos, especialmente cubanoamericanos y dominicanos viajan a República Dominicana para disfrutar de las vacaciones de verano junto a sus familiares.
Desde el pasado jueves 25, las autoridades de Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut impusieron una cuarentena a todos los viajeros procedentes del Sur de la Florida hacia estos estados del norte, a fin de evitar un rebrote de la enfermedad en la región.
Si a partir del primero de julio se permite la entrada de turistas sin control sanitario, especialmente de la Florida, Texas o California, o de cualquier parte del mundo, la declaración de “Estado de Epidemia Nacional” que propuso recientemente el ministro de Salud Pública en RD podría ser impuesto a su conveniencia lo que podría afectar seriamente la asistencia masiva a los centros de votación o la celebración de las elecciones presidenciales extraordinarias programadas para el próximo 5 de Julio.
La estrategia del gobierno dominicano de aplicar una cuarentena nocturna en el país fue un plan fallido de contención de la enfermedad, ya que no detuvo el incremento de enfermos y muertos por Coronavirus.
Según los datos ofrecidos por el ministro de Salud, hasta el sábado 27 de junio República Dominicana registraba 30,619 enfermos de Coronavirus y 718 muertes.