Es de conocimiento universal, que los dominicanos somos expertos en todo.
Y, felizmente, como también somos muy extrovertidos, no negamos muestra condición de todólogos y lo expresamos sin ambages.
Otra de nuestras condiciones congénitas es, que nos oponemos a todo. Principalmente si la iniciativa parte del gobierno de turno. De ahí la frase: ¡Abajo el que suba!
El tema que nos concierne en estos momentos es, la construcción, con capital privado, de un aeropuerto internacional en al área de Bávaro, en la punta oriental de la isla La Española. La zona del país más desarrollada, turísticamente hablando.
Ya salieron los expertos y los opositores con sus argumentos.
Una de las preguntas que escuchamos es esta belleza: ¿Por qué no se construye el aeropuerto en Monte Cristi y desarrollamos esa zona?
La respuesta no puede ser más simple: “Porque esta es una iniciativa del sector privado y este sector invierte donde existan las mayores posibilidades de beneficios.
Otra pregunta es: ¿Por qué construir un aeropuerto a 30 minutos de otro?
Hay muchas respuestas a esta interrogante:
1ro. – Porque si usted es dueño de su dinero, usted lo invierte donde usted quiera.
2do.-Porque felizmente nuestro turismo está cambiando del todo incluido, que es el tipo de turismo que menos aporta económicamente, por el turismo de convenciones, de espectáculos, de salud, de cultura, etc. Que es más exigente, pero que genera mucho más beneficio.
3ro. – Porque al turista hay que darle las mayores facilidades y conveniencias posibles.
Antes de la construcción del aeropuerto de Punta Cana, que, dicho sea de paso, muchos, como siempre, se opusieron, un turista llegaba al aeropuerto Internacional de Las Américas, luego de varias horas de vuelo y tenía que hacer un recorrido en autobús, de más de tres horas para llegar a su destino final.
Lo ideal para un turista sería que el aeropuerto quedara en el techo del hotel donde se va a hospedar.
Esto no es una exageración. Hay Resorts en Atlantic City, New Jersey, por ejemplo, donde a los llamados “High Rollers” que son los grandes apostadores, se les espera en los aeropuertos del área tri estatal (New York, New Jersey y Connecticut) con un helicóptero ejecutivo y luego de un corto vuelo de 10 a 15 minutos, quedan instalados en la suite de su hotel.
Siguiendo con los casinos, el aeropuerto Internacional McCarran de Las Vegas, Nevada, Estados Unidos de América, está ubicado exactamente al frente de los hoteles Excalibur, Luxor y Mandalay Bay y el Wyndham, Las Vegas, está casi dentro de la pista principal.
De hecho, el hotel más distante de este aeropuerto es el Stratosphere Hotel and Casino, que está situado al final de Las Vegas Boulevard, el llamado “Strip” en el Down Town de las Vegas y solo se toma alrededor de 12 minutos desde el McCarran Internacional.
Cuando se habla de turismo, la ubicación de un aeródromo es fundamental.
El caso del aeropuerto Internacional María Montez en Barahona, es un buen ejemplo.
De este aeropuerto a Bahía de las Águilas, uno de los lugares turísticos con más potencial de la zona, son tres horas de camino por carretera. Esto no lo aguanta cualquier turista.
No se sorprendan si el próximo aeropuerto en desarrollarse sea la actual pista de aterrizaje de Cabo Rojo, en Pedernales. Distante solo 30 minutos de este paraíso terrenal.
El gobierno a instalarse el próximo 16 de agosto, lo menos que le conviene en estos cruciales momentos es, ponerle trabas al turismo.
Carlos McCoy