Un simple dispositivo similar a un auricular estimula imperceptiblemente un nervio clave que conduce al cerebro podría mejorar significativamente la capacidad del usuario para aprender los sonidos de un nuevo idioma.
Como resultado los investigadores pudieron observar mejoría significativa en la capacidad de los hablantes nativos de inglés para distinguir entre tonos mandarín inclusive dos veces más rápido. Esto fue posible mediante el uso de estimulación no invasiva y sincronizada con precisión del nervio vago.
La investigación realizada por neurocientíficos de la Universidad de Pittsburgh y UC San Francisco fue publicado npj Science of Learning (una revista asociada de Nature) revela que el dispositivo también puede tener una amplia gama de aplicaciones para impulsar otros tipos de aprendizaje.
"Esta es una de las primeras demostraciones de que la estimulación no invasiva del nervio vago puede mejorar una habilidad cognitiva compleja como el aprendizaje del lenguaje en personas sanas", agregó Matthew Leonard, PhD, profesor asistente en el Departamento de Cirugía Neurológica en el Instituto Weill de UCSF para Neurociencias, cuyo equipo desarrolló el dispositivo de estimulación nerviosa.
"Demostrar que la estimulación nerviosa periférica no invasiva puede facilitar el aprendizaje del lenguaje abre potencialmente la puerta para mejorar el rendimiento cognitivo en una amplia gama de dominios", dijo el autor principal Fernando Llanos, PhD, investigador postdoctoral en el Laboratorio de cerebro sano de Pitt.
Como lo lograron
Los investigadores utilizaron una técnica no invasiva llamada estimulación del nervio vago transcutáneo (tVNS), en la que se coloca un pequeño estimulador en el oído externo y puede activar el nervio vago mediante pulsos eléctricos imperceptibles para estimular una de las ramas cercanas del nervio.
Para su estudio, los investigadores reclutaron a 36 adultos nativos de habla inglesa y los capacitaron para identificar los cuatro tonos del chino mandarín en ejemplos de habla natural, utilizando un conjunto de tareas desarrolladas en el Sound Brain Lab para estudiar la neurobiología del aprendizaje de idiomas.
Los participantes que recibieron tVNS imperceptibles emparejados con dos tonos mandarín que suelen ser más fáciles de distinguir para los angloparlantes mostraron mejoras rápidas en el aprendizaje de distinguir estos tonos.
Al final de la capacitación, los participantes fueron un 13 por ciento mejores en promedio en la clasificación de tonos y alcanzaron el rendimiento máximo dos veces más rápido que los participantes de control que usaron el dispositivo tVNS pero que nunca recibieron estimulación.
"Existe la sensación general de que las personas no pueden aprender los patrones de sonido de un nuevo idioma en la edad adulta, pero nuestro trabajo históricamente ha demostrado que eso no es cierto para todos", dijo Chandrasekaran. "En este estudio, estamos viendo que tVNS reduce esas diferencias individuales más que cualquier otra intervención que haya visto".
"Este enfoque puede nivelar el campo de juego de la variabilidad natural en la capacidad de aprendizaje de idiomas", agregó Leonard. "En general, las personas tienden a desanimarse por lo difícil que puede ser el aprendizaje de un idioma, pero si pudieras darle a alguien entre un 13 y un 15 por ciento mejores resultados después de su primera sesión, tal vez sería más probable que quisiera continuar".
El artículo es de la autoría de Nicholas Weiler y se puede encontrar integro en el siguiente llnk
https://www.ucsf.edu/news/2020/08/418211/non-invasive-nerve-stimulation-boosts-learning-foreign-language-sounds