Para la Organización Mundial de la Salud la vuelta al colegio solo es segura si es baja la transmisión del coronavirus en la comunidad en la que los centros educativos operan. Sin embargo un estudio en Bélgica muestra que los niños tienen menos posibilidades de contagiarse de coronavirus en la escuela que en su hogar.
Investigadores analizaron las estadísticas de infecciones entre menores de 18 años desde marzo hasta fines de junio.
Para ello, recolectaron información de 4.715 personas que fueron puestas en cuarentena preventiva por haber tenido contacto estrecho en los colegios con alguien infectado.
Se estima que del total evaluado 11 empleados y 36 alumnos se infectaron en los colegios, según publicaron medios del país europeo de que se hizo eco Actualidad RT
"Esto es solo 0,8 % de los 4.472 niños en cuarentena", detalló el virólogo Steven Van Gucht, quien agregó que se puede afirmar que "el porcentaje de infecciones secundarias en la escuela es muy bajo".
"Como comparación: en situaciones de hogar, un paciente infecta a entre el 10 y el 20 % de los miembros de su familia, un porcentaje que es mucho mayor que en la escuela", continuó.
Volviendo a las conclusiones de la OMS reseñada por la agencia EFE. 'Lo más importante para volver al colegio es que la enfermedad se reduzca en la comunidad. Si la transmisión es baja en la comunidad, si la vigilancia epidemiológica, el rastreo de contactos y la sanidad son buenos, entonces las escuelas pueden reabrir', dijo el director del Departamento de Emergencias Sanitarias de la OMS, Mike Ryan.
Las escuelas han empezado a reabrir en algunos países de Europa y el curso escolar se habrá reanudado plenamente en este continente y en Norteamérica en las próximas semanas, a pesar de que no se ha logrado poner bajo control la pandemia de coronavirus.
El responsable en la OMS opina que 'la vuelta al colegio en contextos de transmisión intensa (del virus) en la comunidad es muy difícil' y agregó que incluso en los lugares con relativamente pocos casos 'se requiere precaución'.
Ryan alabó las ideas innovadoras de algunos países ante el comienzo del año escolar para prevenir la circulación del coronavirus en los centros docentes, como hacer que una parte del aprendizaje sea presencial y otra virtual, escoltar a los niños a las aulas y no permitirles que circulen por el colegio o escalonar los horarios de entrada y salida.
Otros ejemplos que mencionó son la reducción del número de profesores presentes en el colegio el mismo día, la separación de las mesas de trabajo y, en los casos en que esto no sea posible, el uso de mascarilla.
Destacó la importancia de que se insista en el lavado de manos, de que se pongan más puntos de agua para este fin y de mantener una vigilancia para detectar casos sospechosos en las escuelas.