Santo Domingo.- La Dirección de Gestión del Riesgo de Desastres, del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo comenzó el proceso de elaboración de una Estrategia Nacional de Zonas de Alta Vulnerabilidad, como parte de las prioridades para territorializar las políticas públicas con miras a lograr un desarrollo seguro y resiliente.
Así lo informó la directora de Gestión del Riesgo de Desastres, ingeniera Mercedes Feliciano, con más de 25 años de experiencia impulsando procesos de gestión del riesgo de desastres a través del Sistema Nacional de Prevención, Mitigación y Respuesta, entre otras instituciones sectoriales.
“Esa estrategia permitirá identificar zonas vulnerables fundamentalmente a inundaciones y deslizamientos que además coinciden con los lugares donde vive la gente con mayores desigualdades socioeconómicas; nos facilitará la planificación del desarrollo con enfoque de reducción del riesgo de desastres”, expresó Feliciano, quien desempeña la ardua labor con un equipo multidisciplinario de profesionales.
“La participación de todos los actores, el sector privado, sectoriales, cooperación, organizaciones sin fines de lucro, gobiernos locales, es de vital importancia para la efectividad de esta política pública. De modo que los lineamientos que surjan de esta identificación de zonas vulnerables puedan ser asumidos por todas estas instituciones y organizaciones”, adelantó Feliciano.
Feliciano afirmó que “el desastre retrasa el desarrollo que se ha logrado en años”, y refirió a la investigación del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo en conjunto con el Banco Mundial que concluye que al país le costaría 1,600 millones de dólares en 20 años la recuperación de los efectos de un desastre natural, lo que equivale a un aproximado de 1.6% del PIB.
La especialista y docente de gestión de riesgo de desastre que ha trabajado el tema en importantes sectores como el de educación y salud, consideró de suma importancia la planificación del desarrollo como una forma de impulsar la política transversal de gestión del riesgo de desastres para asegurar que los territorios sean resilientes.
Dijo que también trabajan en una Estrategia de Transferencia de Riesgo para el Sector Agropecuario para hacer otro piloto en la Línea Noroeste que se refiere a mecanismos de aseguramiento, como los créditos contingentes y otras transferencias monetarias para cubrir las pérdidas y los daños que ocasionan los desastres.
“Estos proyectos pilotos tienen como objetivo el fortalecimiento institucional y son orientados por nuestra dirección, de modo, que las instituciones obtengan mejores capacidades para transversalizar el tema de gestión de riesgo en sus procesos de planificación operativa y en sus prácticas institucionales”, argumentó Feliciano.
Transversalización con las sectoriales y gobiernos locales
La Dirección de Gestión de Riesgo de Desastres también trabaja en la definición de una estrategia de transversalización de la gestión del riesgo de desastres y del cambio climático en la planificación tanto en las instituciones sectoriales como con los territorios. “Para esto incidimos en los instrumentos de planificación que desarrollan las instituciones públicas del gobierno central a través de los Planes Estratégicos Institucionales y su relación con el Plan Nacional Plurianual y también en los planes de ordenamiento y desarrollo territorial, instrumentos claves en la planificación municipal.
En ese sentido, uno de los trabajos que se desarrolla es un proceso de actualización del Sistema de Recopilación y Evaluación de Daños y Pérdidas (SIRED-RD). Esta herramienta es manejada por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo tiene como objetivo hacer la cuantificación de los daños y pérdidas a partir de reportes que informan cada una de las sectoriales luego de un desastre.
“Eso facilita que el Gobierno destine los recursos en menos tiempo para la recuperación postdesastre”, apuntó Feliciano. También implementan acciones para transversalizar el tema del cambio climático en todos los trabajos y tareas de la dirección. A través de la esta Dirección, el Ministerio de Economía es compromisario de los acuerdos internacionales para enfrentar el cambio climático.
La República Dominicana es signataria del Acuerdo de París y la Dirección de Gestión de Riesgo de Desastre representa al Ministerio de Economía en el espacio de Contribución Nacionalmente Determinada (NDC-RD), que es el compromiso que tiene el país para reducir las emisiones de los gases de efecto invernadero.
Al Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo le corresponde la implementación e impulso de la política nacional transversal de gestión del riesgo de desastres, como lo establece la Ley 1-12 de la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030 y su reglamento de aplicación.