La magistrada Ramos sostuvo que el desinterés que muestran muchas víctimas en los casos puestos a disposición de la justicia es lo que provoca que los delincuentes cibernéticos persistan en sus acciones.
SANTO DOMINGO.-La procuradora fiscal del Distrito Nacional exhortó a los ciudadanos que han sido víctimas de delitos electrónicos a acudir al Ministerio Público y darle seguimiento a sus casos hasta lograr la condena de los delincuentes.
La magistrada Rosalba Ramos aseguró que en lo que concierne a su jurisdicción, los afectados por esa práctica delictiva pueden estar seguros de que tendrán el apoyo de la Fiscalía.
Señaló que la delincuencia electrónica sólo puede tener auge si los autores de esos ilícitos penales no tienen de frente a las autoridades.
"Si los delincuentes saben que las víctimas al final abandonarán sus casos y no van a tener las consecuencias que se derivan de sus acciones delictivas, en esa misma medida se incrementarán las distintas modalidades de delitos de alta tecnología", indicó.
Agregó que si por el contrario, las víctimas sostienen la acusación contra sus victimarios, el Ministerio Público mantendrá el seguimiento hasta lograr que los jueces dicten sentencias y los delincuentes vayan a prisión.
Dijo que es la única vía de lograr acciones enérgicas para enfrentar uno de los delitos más lucrativos para quienes los practican.
"La Fiscalía del Distrito Nacional trabaja con las demás autoridades en la persecución de los delitos electrónicos, pero debemos contar con la colaboración de las víctimas hasta conseguir sentencias", acotó.
La magistrada Ramos sostuvo que el desinterés que muestran muchas víctimas en los casos puestos a disposición de la justicia es lo que provoca que los delincuentes cibernéticos persistan en sus acciones.
Recordó que los delitos de alta tecnología están tipificados y sancionados en la Ley 53-07, la cual contempla una serie de ilícitos que pueden terminar en condenas para los infractores.
La semana pasada, la magistrada Ramos aseguró que la delincuencia electrónica mueve recursos económicos muchas veces mayores que el narcotráfico.
Señalaba que el abandono de los casos por parte de las víctimas frenaba la efectiva judicialización de esos delitos.