Veo mucha ignorancia y terquedad en ese comportamiento, aunque creo que la principal excusa es que les tienen pánico a las inyecciones.
El médico José Rafael Yunén, director de la Unidad de Cuidados Intensivos y del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Centro de Diagnóstico Medicina Avanzada y Telemedicina (Cedimat), considera que es muy importante que la población dominicana se vacune contra el coronavirus para poder alcanzar lo que él define como “la inmunidad de rebaño” y avanzar hacia la normalización de las actividadescotidianas.
Este consejo también lo han expresado otros especialistas dominicanos y extranjeros e incluso el presidente Luis Abinader y el ministro de Salud Pública, Daniel Rivera, se han pronunciado en varias ocasiones.
El galeno explicó que es fundamental que cada persona complete las dos dosis de la vacuna porque la primera solo cubre un 16 % de protección. Tener una dosis y no tener nada, es casi lo mismo.
Manifestó que el país puede conseguir la inmunidad de rebaño si se vacuna al 70 por ciento de la población, si las variantes lo permiten y si se hace en un tiempo medido, al tiempo que consideró necesario reforzar el componente educación ante las personas que dicen que no se vacunan, porque “es 40 veces más común la posibilidad de muerte por Covid que por una reacción de cualquiera de las vacunas”.
En cuanto a las variantes del virus, el especialista dijo que se continuarán presentando porque, como en otros países,surgen cuando una parte de la población está vacunada y la otra no.
Es bueno saber esas cosas porque ha habido mucha desinformación respecto al proceso de inoculación contra la peste letal, que al momento de escribir este artículo en la República Dominicana ha matado 3,623 personas y 289 mil 288 están infectados con 238 mil 615 recuperados.
Se ha dicho que, de una matrícula de 11 millones de dominicanos, el 40 % (unos 4,400,000) no quiere vacunarse. Eso es grave porque se arriesgan a morir, sobre todo cuando hay en circulación dos variantes virales procedentes de Brasil e Inglaterra.
Veo mucha ignorancia y terquedad en ese comportamiento, aunque creo que la principal excusa es que les tienen pánico a las inyecciones. Ojalá esa sea la razón porque de ser así, se puede avanzar.
Los que se administraron la primera dosis piensan que están libres de contraer contaminación del virus e incluso muchos andan sin mascarillas, no mantienen el distanciamiento físico y se mezclan en las aglomeraciones en plazas comerciales.
Y no es así. Es un error porque aún son vulnerables, según lo confirman los especialistas.
Estamos viviendo escenas de terror con esta pandemia. A diario se infestan más de mil dominicanos, otros mueren en los centros de salud y luego son sepultados en fosas comunes sin la presencia de los familiares.
Los hospitales están saturados de pacientes con esa enfermedad, al extremo que no hay camas para acomodarlos y son escasos los ventiladores para mantenerlos atados a la vida.
Más de 30,000 personas menores de 20 años están infectados, según los reportes del Ministerio de Salud.
El neurocirujano José Joaquín Puello también alertó a la población sobre el riesgo que se incurre al no acogerse a las recomendaciones de las autoridades sanitarias y aconsejó vacunarse.
Más preocupante es lo que ocurre en el Hospital Robert Reid Cabral, donde algunos niños padecen un cuadro similar. De 10 camas disponibles para niños con el virus en ese centro de salud, nueve están ocupadas. Ocho de los menores se encuentran estables y uno en estado delicado de salud, pero no está en Cuidados Intensivos, informó el médico infectólogo Clemente Terrero, director del hospital, aunque aseguró que todos están fuera de peligro.
En ese centro se vive un cuadro deprimente. De los infantes hay tres lactantes de dos, cuatro y cinco meses, y los demás por encima de los tres años. La mayoría de los niños presentan dificultades respiratorias y otros, manifestaciones clínicas como el síndrome inflamatorio multisistémico, que es una afección en la que diferentes partes del cuerpo pueden inflamarse.
Aquellos estúpidos que ignoran los llamados a vacunarse tienen los nichos a su disposición. Solo es cuestión de tomar la decisión correcta.
Los médicos fueron los primeros en el mundo administrarse los biológicos. Por alguna razón lo hicieron y no entiendo por qué nuestra gente aún se resiste a inocularse.
¡Cuánta ignorancia!