El actual mandatario se alzó victorioso en las elecciones del 18 de octubre –celebradas un año después de los comicios de 2019
MADRID, 21 Jun. (EUROPA PRESS) – El ministro de Justicia de Bolivia, Iván Lima, ha anunciado este lunes la apertura de investigaciones contra líderes opositores y cívicos supuestamente involucrados en un presunto "movimiento sedicioso" que buscaría derrocar al presidente, Luis Arce.
Entre los investigados figuran el excívico Luis Fernando Camacho, en el punto de mira de las autoridades bolivianas desde la crisis política de 2019, ya que lideró las protestas contra el expresidente Evo Morales tras las elecciones, y el ex candidato a la Presidencia Virginio Lema.
"Desde el primer momento de la elección, desde los primeros días en los que sabíamos ya que el pueblo boliviano había optado por el presidente Arce con un 55 por ciento de los apoyos, se empiezan a generar una serie de movilizaciones que son estructurales, no son causales", ha explicado Lima.
El titular de Justicia ha indicado que, tras las elecciones, hubo grupos que pidieron "de rodillas" una intervención militar. "Camacho, diciendo que el presidente Arce no siga la suerte del presidente Morales y toda la estructura que se está dando en este momento de generar una situación de convulsión en el país es una muestra evidente de que existe un movimiento sedicioso y esta situación no va a quedar en la impunidad", ha agregado.
Después del descontento surgido por la promulgación de la Ley de Emergencia Sanitaria en Bolivia, Camacho se dirigió a Arce y le dijo que "no se olvidara de cómo salió" Morales. "Que aprenda a respetar lo que significan nuestras instituciones, nuestros médicos, nuestro pueblo, la salud. Empiece a respetar y haga lo que corresponde", añadió.
Arce se alzó victorioso en las elecciones del 18 de octubre –celebradas un año después de los comicios de 2019, que generaron una grave crisis política y la dimisión de Morales– con un 55 por ciento de los apoyos, una cifra que le posibilitó asumir la Presidencia de la nación andina sin necesidad de una segunda vuelta. Sus rivales, Carlos Mesa y el propio Camacho, lograron el 28,8 por ciento de los votos y el 14, respectivamente.