La situación sanitaria ocurre en medio de la intensificación del bloqueo de Estados Unidos contra la nación.
Por Yosley Carrero
LA HABANA, 15 jul (Xinhua) — El gobierno cubano ha intensificado su respuesta a la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19), en medio del mayor rebrote de contagios, hospitalizaciones y decesos desde la detección de los primeros casos en Cuba, en marzo de 2020.
Cuba registró este jueves un récord de 67 muertes en un día a causa de la COVID-19, así como 6.479 contagios en una jornada, para sumar 1.726 personas fallecidas y 263.086 casos confirmados desde el inicio de la pandemia en el país.
La situación sanitaria ocurre en medio de la intensificación del bloqueo de Estados Unidos contra la nación, lo que limita el acceso de Cuba a insumos médicos, materias primas, medicamentos y equipamiento para la producción de vacunas.
El director de Higiene y Epidemiología del Ministerio de Salud Pública de Cuba, Francisco Durán, aseguró que la situación epidemiológica es muy "compleja" en el país, excepto en el municipio especial Isla de la Juventud, donde la población adulta ya fue vacunada contra la COVID-19 con fórmula de producción nacional.
"Nunca Cuba había tenido que enfrentar una situación tan compleja, tanto por el número de casos como por el número de fallecidos", dijo Durán, quien llamó la atención sobre la necesidad de una conducta más responsable por parte de los ciudadanos.
En las últimas semanas, el epicentro de la pandemia en Cuba se ha desplazado de La Habana a la occidental provincia de Matanzas, territorio que acoge al aeropuerto internacional "Juan Gualberto Gómez" y al balneario turístico de Varadero.
Las autoridades cubanas han enviado médicos y profesionales de la salud del Contingente Henry Reeve a las provincias de Matanzas y Ciego de Avila, las cuales han sido identificadas como las de mayor presencia de la variante Delta de coronavirus.
En diferentes regiones del país está en práctica el ingreso domiciliario, ante la insuficiente cantidad de camas para pacientes de la COVID-19, al tiempo que profesionales de la salud y estudiantes de ciencias médicas del país acuden a prestar ayuda en regiones con mayor complejidad sanitaria.
El primer ministro de Cuba, Manuel Marrero, informó en comparecencia televisiva que casi el 60 por ciento de la población tendrá vacunación de forma total al finalizar agosto y que el 80 por ciento habrá recibido al menos una dosis.
"Producir vacunas depende de insumos y entradas. Ha habido una prioridad en los recursos financieros para adquirir esos productos, pero a veces hay un proveedor que nos ha dilatado el proceso de entrega de recursos", puntualizó.
Agregó que este mes la población de 19 años en adelante de La Habana tendrá vacuna contra la COVID-19, mientras que la totalidad de los cubanos lo hará antes del cierre de 2021.
El Ministerio de Salud ha alertado sobre el incremento en el número de contagios en niños y adolescentes, al tiempo que se realizan ensayos clínicos en población pediátrica con vacunas de facturación doméstica.
El territorio cubano mantiene restricciones de movilidad durante horario nocturno, así como cierre de centros culturales, deportivos y recreativos, además de la suspensión de baño en piscinas y playas.
Cuba trabaja en el desarrollo de los candidatos vacunales Soberana 01, Soberana 02, Mambisa, Soberana Plus y Abdala, esta última la primera vacuna latinoamericana con registro, tras obtener la autorización para uso de emergencia por el Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos.
En Cuba se realiza de manera paralela una campaña de vacunación masiva en territorios de alto riesgo epidemiológico, mediante la cual más de 1,2 millones de personas han sido vacunadas contra la COVID-19 en La Habana, la más populosa de las ciudades cubanas con 2,2 millones de habitantes.
Los esquemas de vacunación con tres dosis de las vacunas Abdala y Soberana han demostrado 92,28 y 91,2 por ciento de eficacia, respectivamente, según el informe de autoridades farmacéuticas.
El profesor universitario, Fabio Fernández, comentó en entrevista para Xinhua que en medio de complejas circunstancias, Cuba envía el mensaje de que la prioridad en el país es la protección de la vida de las personas, en el contexto de la pandemia.
"Las vacunas contra la COVID-19 desarrolladas por los científicos cubanos no son sólo una respuesta a la emergencia sanitaria, sino también a la política de bloqueo y asfixia que Estados Unidos ha mantenido contra nuestro país", agregó.