El alza en los precios de los minerales y otros productos básicos favorece este año los ingresos de los exportadores de América Latina, aunque los países que dependen de sus importaciones de alimentos y combustibles deben pagar facturas más altas.
GINEBRA – Los precios de las materias primas han aumentado a lo largo de 2021 en América Latina y el Caribe, con un impacto heterogéneo, dependiendo de la condición de exportadores o importadores de los países, señaló este martes 10 un reporte de la Unctad.
De los 33 países de la región, 14 dependen en alto grado de la exportación de productos básicos, lo que significa que se benefician de las alzas aunque sus ingresos están atados a la incertidumbre de los mercados, según la Unctad (Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo).
“Para muchos exportadores de productos básicos, los aumentos de precios han llevado a aumentos en los ingresos por exportación a pesar del estancamiento o la caída de los volúmenes de exportación”, dice el estudio.
Por ejemplo, los ingresos por exportaciones de Brasil de semillas oleaginosas en los primeros seis meses de 2021 fueron 24,3 por ciento más altos que en el mismo período de 2020, aunque los volúmenes exportados fueron ligeramente inferiores.
La tabla de dependencia respecto de esas exportaciones la encabeza Suriname con 85 por ciento, seguido de Bolivia, con 83 (minerales en ambos casos), Ecuador (82 por ciento, agricultura), Jamaica, Perú, Guyana y Chile (minerales), Paraguay y Uruguay (agricultura) y Venezuela y Colombia (productos energéticos).
Belice, Argentina y Brasil completan el grupo con más de 60 por ciento de sus ingresos por exportaciones atados a la venta de materias primas, y con entre 50 y 60 por ciento les escoltan Cuba, Guatemala, Granada, Trinidad y Tobago, Nicaragua y Santa Lucía.
La Unctad señaló que, considerando los valores del año 2000 como base 100, los precios del petróleo crudo cayeron casi 50 puntos en 2020 pero han remontado hacia 150, y los del café tipo arábiga cayeron cerca de la línea 100 el año pasado (estaban sobre 200 en 2012) y se han recuperado por encima de la línea de 120.
También es el caso de la soja, que rozó la línea 100 en 2020 (precios a la mitad de 2013), pero ha remontado hacia la cota 200; y el cobre, que se ubicó en la línea 200 el año pasado y ahora bordea la marca de 300, de acuerdo con el reporte divulgado por la Unctad en su sede en esta ciudad suiza.
Un factor clave en el alza de los precios de las materias primas es la recuperación de la actividad económica mundial, a medida que los países avanzaron en sus esfuerzos de vacunación y posterior eliminación de las restricciones de movimiento.
Y un segundo es la mejora de las expectativas de los inversores y los consumidores, que han favorecido en particular los valores de la energía y las materias primas minerales y metálicas.
En los países en desarrollo importadores de productos básicos los resultados se aprecian de modo diferente y la Unctad mostró un ejemplo tomado de Costa Rica.
En ese país centroamericano la factura de importación de cereales durante los primeros cinco meses de 2021 fue 34,8 por ciento más alta que durante el mismo período de 2020. Sin embargo, los volúmenes de importación de esos cereales aumentaron solamente en cinco por ciento.
En el mismo período El Salvador pagó 260 millones de dólares al importar un volumen de cereales y derivados 10 por ciento menor de lo que adquirió por 240 millones de dólares en los cinco primeros meses de 2020.
“Para los países que importan cantidades sustanciales de productos básicos como alimentos y combustibles, los altos precios de los productos básicos significan facturas de importación más altas y podrían provocar un aumento de la pobreza y la inseguridad alimentaria”, señala el reporte.
El alto nivel de incertidumbre en los mercados de productos básicos y los grados de dependencia de ellos, como exportadores o importadores, “subrayan la necesidad de impulsar la resiliencia de las economías de América Latina y el Caribe”.
Los resultados de este estudio se llevarán al foro mundial sobre productos básicos programado del 13 al 15 de septiembre, como precursor de la decimoquinta conferencia cuatrienal de la Unctad, programada del 3 al 7 de octubre y la cual examinará los desafíos de los países en desarrollo que dependen de esos rubros.
Artículo publicado originalmente en Ipsnoticias.net