Los talibán han solicitado la ayuda internacional y ofrecido la explotación de los recursos naturales del país a las empresas extranjeras para reconstruir Afganistán, según un despacho de la agencia Europa Press.
Es un "nuevo y delicado periodo", a la espera de la formación "inminente" y sin elecciones previas de un "Gobierno inclusivo", ha indicado Suhail Shahin,portavoz internacional de los talibán tras solicitar la ayuda de la comunidad internacional.
Durante la entrevista a la cadena estatal de TV china CGTV, Shahin ofreció la explotación de los recursos naturales del país a las empresas extranjeras para reconstruir Afganistán
"El mundo puede explorar nuestros recursos nacionales y naturales. Esta es una invitación general a todos los países que nos están ayudando en este delicado período de nuestra historia", ha indicado.
"No hay tiempo para elecciones y tenemos que preparar una nueva Constitución es un proceso que lleva mucho tiempo", indica Suhail Shahin
Expresa que los talibán han declarado la apertura de un nuevo periodo de posguerra en el país, para el que será necesario la entrada de ayuda inmediata.
"Acabamos de dejar atrás una era de guerra y destrucción y entramos en una nueva fase en la que el pueblo de Afganistán necesita la ayuda de otros países", ha indicado el portavoz.
"Los países deberían venir y ayudarnos en salud, infraestructura, capacitación y varios otros sectores necesarios", ha añadido.
Periplo por los recursos naturales Afganistán
En 2010, un informe de expertos militares y geólogos estadounidenses estimó que Afganistán, uno de los países más pobres del mundo, tenía casi un billón de dólares (850.000 millones de euros) en riqueza mineral, gracias a la enorme cantidad de hierro, cobre, litio y cobalto.
En la década siguiente, la mayoría de esos recursos permanecieron intactos debido a la violencia en curso en el país. Mientras tanto, el valor de muchos de esos minerales se ha disparado, provocado por la transición global a la energía verde.
Un informe de seguimiento del Gobierno afgano realizado en 2017 estimó que la nueva riqueza mineral de Kabul puede llegar a los tres billones de dólares, incluidos los combustibles fósiles, según recoge Deutsche Welle.
También queda por dilucidar el futuro del enorme mercado de opio en el país, actualmente el productor del 80 por ciento de la cosechas que se distribuyen por todo el mundo.