Los talibanes han pedido repetidamente a los empleados gubernamentales que regresen a sus oficinas y reanuden su trabajo con normalidad.
KABUL, 22 ago (Xinhua) — "Desde el domingo pasado no he estado en mi oficina porque nadie sabe qué pasaría a la siguiente hora o por la tarde", susurró Noor Khan.
Khan, de 37 años, un empleado del Departamento de Pasaportes en Kabul, afirmó que ninguno de sus colegas volverá a la oficina por el momento.
Kabul, capital del Afganistán devastado por la guerra, cayó en poder de los combatientes talibanes el 15 de agosto y desde ese día muchas oficinas gubernamentales, escuelas y universidades han permanecido cerradas.
Los talibanes han pedido repetidamente a los empleados gubernamentales que regresen a sus oficinas y reanuden su trabajo con normalidad, pero muchas oficinas del Gobierno y del sector privado, incluidos bancos, escuelas y universidades, han cerrado.
Aunque la situación de seguridad es relativamente estable en comparación con el pasado, los residentes de Kabul parecen dudar sobre su futuro y se preguntan si la paz actual podría ser un momento de calma antes de la tormenta.
"Hasta ahora, los talibanes no han formado ningún Gobierno y Afganistán no tiene presidente ni ningún otro jefe de Estado, lo que prácticamente significa un 'vacío de poder'", dijo a Xinhua otro residente de Kabul, Ahmad Nawed.
Aunque elogió a los combatientes talibanes por restablecer la paz en la ciudad de Kabul, Nawed dijo que "el vacío de poder" podría conducir a una situación caótica en Afganistán.
"Me preocupa que el ambiente pacífico actual, como una pausa antes de la tormenta, pueda conducir a combates" en el país, dijo.
"Espero que los talibanes formen pronto su Gobierno", dijo Nawed.
El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, ha dicho que los principales líderes del grupo están entablando conversaciones con los políticos para formar un Gobierno de base amplia.
El mulá Abdul Ghani Baradar, jefe político del Talibán, llegó a Kabul el sábado para consultar con políticos y grupos sobre la formación de un nuevo organismo gobernante en Afganistán.
Un mecánico de automóviles, Mohammad Husain, también agradeció a los talibanes por poner fin a la guerra y garantizar una paz relativa en Kabul, y dijo que "la paz lo es todo y una paz duradera puede garantizar empleos estables e ingresos regulares" en todos en el país.
Comentó a Xinhua que sus ingresos diarios se han visto afectados recientemente.
Husain afirmó que antes de la caída de Kabul, ganaba entre 1.500 afganis (unos 17,6 dólares estadounidenses) y 2.000 afganis (unos 23,5 dólares) diarios, pero que actualmente ganaba entre 500 afganis (unos 5,8 dólares) y 1.000 afganis (unos 11,8 dólares).
"Tengo dudas sobre el futuro, ya que los talibanes aún no han formado su Gobierno, aunque ya han pasado ocho días desde la caída de Kabul. Las oposiciones armadas también están activas en algunas partes del país y podrían crear problemas de seguridad", dijo Hamidullah, un vendedor de frutas.
Hamidullah expresó su preocupación por el futuro de Afganistán y señaló que la nueva administración puede enfrentar enormes desafíos si los países extranjeros continúan manteniendo sus misiones diplomáticas cerradas en Kabul. Fin