Denuncian que la contaminación ambiental provocada por la BG afecta su salud, y temen ocurra una desgracia si se desborda la presa de cola instalada en el Yagal.
Más de 600 familias residentes en la comunidad de La Piñita, en el municipio de Cotuí demandaron del presidente Luis Abinader su reubicación urgente, ya que sus vidas corren peligro por los altos niveles de contaminación que hay en esa zona producto de las operaciones de la empresa minera Barrick Gold.
Una comisión de los residentes en la citada comunidad utilizó la plataforma de la Semana por la Justicia Climática de América Latina y El Caribe, para denunciar que la presencia la Barrick Gold en Cotuí ha sido una maldición ya que desde hace varios años no tienen agua porque los principales ríos de la zona han desaparecido. Dice que las mujeres sufren de enfermedades vaginales porque deben asearse con agua contaminada.
Pidieron al presidente Abinader que los ayude a sacar a sus familias de ese lugar, que es totalmente inhóspito para la vida humana, por los altos niveles de contaminación, la falta de agua y las graves enfermedades que padecen los residentes allí.
Leoncia Ramos, secretaria general del Movimiento Nuevo Renacer, vocera del Grupo de los Encadenados dijo que las prácticas lesivas contra el medio ambiente ejecutadas por la Barrick han hecho desaparecer los ríos Maguaca y el Yagal; este último sepultado por la presa de cola construida por la minera multinacional.
“Esa presa de cola de la Barrick Gold, nos cubre, es nuestro manto. Vivimos debajo de ella. Cuando hay temporada de lluvia nosotros no dormimos por el temor a que esa presa de cola se desborde y nos sepulte a todos”, agrega la señora Ramos.
La vocera del grupo Los Encadenados, que se formó para exigir su reubicación hacia otro lugar donde la contaminación y las sustancias tóxicas no pongan en riesgo su vida, llamó al Presidente Abinader a ir en su auxilio antes de que se produzca una tragedia que cobre la vida de cientos de personas.
“Nosotros no tenemos una gota de agua para tomar desde hace nueve años. La empresa nos regala dos botellones de agua cada tres días. Nuestra situación es desesperante”, declaró.
Dijo que en el Ministerio de Energía y Minas hay un censo que data del año 2019, donde se determinó que en una primera fase serían reubicados 450 familias hacia la comunidad del Guanábano, en el municipio de Cotuí. Agrega que allí se identificó un terreno de 14 mil tareas.
“Hemos visitado al ministro de energía y Mina para plantearle la urgencia de que seamos reubicados, y hasta el momento no se nos ha hecho caso”, manifestó Leoncia Ramos.
Explica que la explotación de sulfuro a cielo abierto ha provocado muchas enfermedades en los residentes de la citada comunidad, y la tierra ha perdido la capacidad para producir, fruto de las lluvias ácidas.
La vocera de los Encadenados, Leoncia Ramos intervino al finalizar el foro: Mujer, Patriarcado, Justicia Climática, Soberanía Alimentaria y Extractivismo, donde participaron expositoras de Chile y Paragua, y contó con la moderación del diputado al Parlacen doctor Carlos Sánchez.
Ramos estuvo acompañada por Ludovino Fernández, y Sonia Perdona; ambos del grupo los Encadenados.