En conmemoración del Día Mundial del Corazón se pide a los dominicanos asumir la responsabilidad de su salud e incluir hábitos que sean beneficiosos para esto.
Santo Domingo, República Dominicana. Las enfermedades cardiovasculares comprenden una variedad de trastornos del corazón y los vasos sanguíneos, representando la principal causa de mortalidad a nivel mundial y en el país, impactando en más de un 30% a personas con edades comprendidas de 30 a 69 años en la República Dominicana.
En el marco de la celebración del Día Mundial del Corazón, que se conmemora cada 29 de septiembre, la Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos, Inc. (ARAPF), motiva a la población a sensibilizarse sobre las enfermedades cardiovasculares, su control y tratamiento adecuado.
ARAPF resalta que en situaciones de enfermedades crónicas como las afecciones del corazón se evidencia la importancia de la accesibilidad de medicamentos preventivos de venta libre para llevar salud a esas zonas donde la atención médica puede ser difícil.
Según los expertos, el uso de medicamentos cardioprotectores y una detección temprana, podría significar una mejora en el pronóstico de estas afecciones y en la prevención de los eventos cardiovasculares, como infartos. Por esto se recomienda empezar a visitar de manera regular a un médico cardiólogo a partir de los 45 años.
Factores como el exceso en la cantidad de horas dedicadas a trabajar, descuidar el bienestar emocional, no conciliar las horas de sueño apropiadas, no cuidar tu salud bucal provocando que las baterías de la boca acaben llegando al corazón y episodios emocionales como la ira y la ansiedad son perjudiciales para la salud cardiovascular.
Es por esto que adicional al tratamiento con fármacos, se recomienda a la población llevar una alimentación saludable, equilibrada y variada, disminuyendo el consumo de grasas saturadas y aumentando la ingesta de omega 3, frutas, verduras, cereales integrales y pescados, limitar el consumo de sustancias perjudiciales como la sal, el tabaco o el alcohol, controlar el estrés, realizar 30 minutos mínimos de ejercicio físico diario, revisiones periódicas del colesterol, tensión arterial, niveles de glicemia y el peso corporal, son hábitos que contribuyen a prevenir las enfermedades del corazón y complementan la labor de los fármacos preventivos.
Cómo reaccionar a un infarto:
- Si te encuentras solo, para facilitar la respiración colócate boca arriba, imparte un ligero masaje en el centro del pecho y llama a emergencias o avisa a alguna persona cercana.
- Si te toca dar auxilio a una persona que está teniendo un infarto, estíralo en posición horizontal, solicita una ambulancia, y en el tiempo de espera golpea rítmicamente su pecho.