El portavoz de los talibán y viceministro de Información afgano, Zabihulá Muyahid, ha confirmado el suceso en su cuenta oficial en la red social Twitter.
MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) – Al menos 26 personas han muerto y más de 50 han resultado heridas este viernes a causa de la explosión de una bomba en una mezquita chií en la localidad de Jan Abad, en la provincia afgana de Kunduz (norte), según han confirmado fuentes de la cadena estadounidense CBS.
La explosión ha tenido lugar durante los rezos del viernes y, según ha confirmado una fuente oficial local a la cadena, se trataría de una bomba que portaba un niño en una mochila. El menor se habría introducido en la mezquita bajo la apariencia de un limpiabotas.
"Al menos 26 cadáveres han sido trasladados al hospital del centro provincial", ha hecho saber en su cuenta de Twitter el corresponsal en Afganistán de la CBS, Ahmad Mujtar. Los heridos han sido trasladados a centros de Médicos Sin Fronteras y hogares particulares.
Por su parte, la misión de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) ha tomado nota de informaciones adicionales que elevan el total de muertos y heridos en torno al centenar antes de repudiar el atentado, que forma parte de "un patrón de violencia inquietante" al tratarse del tercer ataque mortal de esta semana, aparentemente dirigido contra una institución religiosa del país.
El portavoz de los talibán y viceministro de Información afgano, Zabihulá Muyahid, ha confirmado el suceso en su cuenta oficial en la red social Twitter y ha manifestado que "varios compatriotas han caído mártires o han resultado heridos".
Asimismo, ha recalcado que "las fuerzas especiales han llegado al lugar y están investigando", sin dar una cifra de muertos. Vídeos que circulan en redes sociales muestran varios cuerpos en el interior de la mezquita, que ha sufrido graves daños materiales.
Por ahora ningún grupo ha reclamado la autoría del ataque, si bien Estado Islámico ha asegurado estar detrás de varios atentados durante las últimas semanas, incluido el perpetrado el domingo en una mezquita de Kabul durante el funeral de la madre de Muyahid.
El propio Muyahid ha negado este viernes que el grupo yihadista suponga "una amenaza" y ha resaltado que es más bien "un dolor de cabeza". "Genera dolores de cabeza en algunos lugares pero es inmediatamente eliminado tras cada incidente", ha valorado.
Las autoridades talibán han anunciado durante las últimas semanas la muerte y el arresto de varios supuestos miembros del grupo yihadista, que considera a los talibán unos traidores a la ortodoxia de la 'sharia' o ley islámica y defienden una interpretación mucho más dura.Imprimir