La deuda nacional acumulada de esta triada ha crecido en la friolera de $ 5,48 billones en los últimos 12 meses.
La situación de la deuda nacional mundial se dirige a una situación de crisis que se ha complicado por el impacto económico de la pandemia de coronavirus. Sin embargo, incluso las economías establecidas no se han librado, ya que registran niveles históricos de deuda.
Según los datos adquiridos por Finbold, la deuda nacional acumulada de Estados Unidos, Japón y China alcanzó los 52,35 billones de dólares en noviembre de 2021. Durante el año pasado, la deuda aumentó un 11,6% desde la cifra de noviembre de 2020 de 46,87 billones de dólares. Por lo tanto, la deuda nacional acumulada ha crecido en la friolera de $ 5,48 billones en los últimos 12 meses.
Estados Unidos tiene la deuda más alta en 2021 con 28,95 billones de dólares, un crecimiento del 6,35% con respecto a un período similar el año pasado. La deuda de Japón ha crecido un 23,39% a 15,14 billones de dólares. Entre los países destacados, China tiene la menor deuda nacional con $ 8,26 billones, que creció $ 7,38 billones con respecto al año pasado.
El papel de la pandemia en el aumento de la deuda nacional
La investigación destaca cómo la reciente crisis económica ha contribuido al aumento de la deuda nacional. Según el informe de investigación:
"En general, la pandemia provocó un desempleo generalizado con el cierre de empresas, lo que provocó una reducción de los ingresos fiscales y un aumento del gasto estabilizador automático para el seguro de desempleo. En consecuencia, los países enfrentaron déficits presupuestarios que se han disparado teniendo en cuenta que han instituido leyes para amortiguar la economía mediante el estímulo paquetes ".
Al igual que otros países del mundo, el aumento vertiginoso de la deuda nacional de EE. UU., China y Japón ha generado preocupaciones sobre la amenaza que representa la deuda. Según los economistas, el aumento de las deudas nacionales podría obstaculizar el crecimiento, lo que podría generar más deuda.
Además, una crisis puede empujar a los países a imprimir más dinero, lo que a su vez genera inflación. Generalmente, para manejar la situación actual de la deuda, los países se ven obligados a respetar la transparencia, reestructurar las políticas económicas y trabajar para reducir la deuda.
Fuente: finbold.com