Los organismos de la ONU se comprometen con una agrupación de más de 60 países para que todos los niños necesitados reciban una comida nutritiva en la escuela para 2030.
EUROPA PRESS –
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), UNICEF, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) han respaldado una coalición internacional para mejorar la nutrición, la salud y la educación de los niños en edad escolar de todo el mundo tras el cierre de escuelas a causa de la pandemia de COVID-19.
La pandemia ha causado grandes trastornos en las escuelas y la educación en todo el mundo y millones de niños no han podido recibir sus comidas en la escuela ni beneficiarse de los servicios de salud y nutrición en las escuelas, como la vacunación y el apoyo psicosocial. En todo el mundo, más de 150 millones de niños siguen sin recibir comidas y servicios esenciales de salud y nutrición, según la OMS.
En una declaración conjunta, estos cinco organismos de la ONU se han comprometido a ayudar a la Coalición de Comidas Escolares, una agrupación de más de 60 países liderada por Francia y Finlandia, cuya visión es dar a todos los niños necesitados la oportunidad de recibir una comida nutritiva en la escuela para 2030.
La coalición también está comprometida con los programas de comidas escolares "inteligentes", que combinan las comidas regulares en la escuela con intervenciones complementarias de salud y nutrición para el crecimiento y el aprendizaje de los niños.
"Los programas de salud y nutrición en las escuelas son intervenciones impactantes para apoyar el crecimiento y el desarrollo de los niños y adolescentes en edad escolar. Pueden ayudar a combatir la pobreza infantil, el hambre y la malnutrición en todas sus formas. Atraen a los niños a la escuela y apoyan el aprendizaje de los niños, así como su salud y bienestar a largo plazo", han comentado los líderes de las agencias de la ONU en su declaración.
Así, han defendido que las comidas escolares pueden servir de "trampolín" para la transformación del sistema alimentario. "En la medida de lo posible, pueden utilizar alimentos cultivados localmente, apoyando los mercados y sistemas alimentarios nacionales y locales, mejorando las oportunidades de los pequeños agricultores y de las empresas locales de restauración, muchas de ellas dirigidas por mujeres. Estos programas pueden contribuir a la consecución de al menos siete de los ODS", apuntan.
Cada una de las cinco agencias de la ONU aportará un conjunto específico de conocimientos a la coalición. Más de 50 socios, entre los que se encuentran ONG, la sociedad civil, fundaciones y otras organizaciones, han manifestado que también prestarán su apoyo.
La coalición trabajará para restablecer las comidas escolares y otros programas de salud y nutrición que estaban en marcha antes de la pandemia de COVID-19, ampliarlos para que lleguen a 73 millones de niños que no estaban cubiertos antes de la pandemia y aumentar su calidad en parte estableciendo normas y vinculándolos a la producción local de alimentos cuando sea posible.