Busca que el documento funcione como instrumento de naturaleza recomendatoria, preventiva y no sancionatoria
El Pleno de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) aprobó la actualización del Código de Comportamiento Ético del Poder Judicial para que sea coherente con la misión y visión institucional de este poder del Estado
El objetivo de la actualización de dicho documento es que funcione como instrumento de naturaleza recomendatoria, preventiva y no sancionatoria para orientar las conductas de las personas al perfil modelado en el Código.
Armando Andruet, expresidente del Tribunal Supremo de Córdoba, en Argentina, y profesor titular de la cátedra de filosofía del Derecho y filosofía jurídica, destaca el valor del Código de Comportamiento Ético aprobado por la Suprema Corte de Justicia.
Mientras que el presidente de la SCJ, Luis Henry Molina Peña, afirmó que con la actualización del Código de Comportamiento Ético, el Poder Judicial tiene un compromiso en la construcción de la democracia y en la consolidación social del Estado de Derecho.
“Mediante sus Valores, Principios y Orientaciones, el Código de Comportamiento Ético del Poder Judicial que ahora presentamos, está llamado a incorporarse en nuestras vidas profesionales como cultura institucional, para fortalecer la labor judicial en busca de un modelo de justicia inspirada en la rectitud y en el ideal de excelencia”, indicó el magistrado presidente.
El Código contempla cinco valores pilares del sistema ético judicial: “Buen-mejor juez/jueza”, “Excelencia Judicial”, “Confianza Pública”, “Ejemplaridad” y “Transparencia Judicial”; estos se encuentran estructurados de manera amigable al lector con los referidos principios, complementados cada uno de ellos con “Conceptualizaciones” y un conjunto de criterios operativos que se han nombrado como “Orientaciones”.
En tanto que el juez de la Primera Sala de la SCJ , magistrado Justiniano Montero Montero, resalto “El relanzamiento de esta nueva versión del Código de Comportamiento Ético, representa un llamado colectivo para que asumamos la concepción del cambio y la transformación institucional como un emblema patrio, avalado en la visión de tolerancia y de respeto mutuo”, sostuvo el juez de la Suprema.
En ese sentido, el también comisionado nacional ante la Comisión Iberoamericana de Ética Judicial (CIEJ) agregó que la actualización de este Código significa un nuevo norte para evitar una “enfermedad incurable con efectos letales para nuestra salud institucional”.
En la actividad estuvieron presentes jueces de la Suprema Corte de Justicia, integrantes del Consejo del Poder Judicial, servidores judiciales, así como representantes de los distintos poderes del Estado.