Ante el pánico, se han puesto en práctica medidas más estrictas de control a viajeros internacionales.
Con la llegada de la variante viral Omicron al estado de Nueva York, la gobernadora, Kathy Hochul, se vio en la necesidad de ordenar el estado de emergencia, el cual entró en vigencia el pasado viernes 3, poniendo de nuevo en alerta a todos los residentes de la Gran Manzana.
Y no es para menos, hace apenas dos semanas que Omicron hizo su aparición en Sudáfrica, y en ese corto período de tiempo ya se ha detectado en más de 20 países, entre los cuales, además de Estados Unidos, se citan a Alemania, Japón, Reino Unido, Italia y Canadá.
Ante el pánico, se han puesto en práctica medidas más estrictas de control a viajeros internacionales, así como prohibiciones de vuelos desde Sudáfrica, para evitar la propagación masiva.
En una conferencia de prensa, la gobernadora de NY confirmó el pasado jueves 25 los primeros cinco casos detectados en varios condados. Peroaseguró que los síntomas de los infectados fueron leves y que estos lograron la recuperación en sus hogares.
Los casos fueron detectados en las ciudades de Nueva York (2), Brooklyn (1), Long Island (1) y Suffolk (1), según se ha revelado.
Con respecto al virus del Covid, la gobernadora informó que las hospitalizaciones superaron las 3mil personas, un aumento del 57% solo en el mes de noviembre, por lo que mantuvo sus recomendaciones de prevención a vacunarse, lavarse las manos y usar mascarillas.
La llegada oficial de la temporada invernal en los Estados Unidos es el 21 de diciembre, y con ella las celebraciones de las fiestas de Navidad y Año Nuevo, las que tendremos que festejar con el temor de la presencia de la nueva variante del virus Covid-19.
El año pasado, casi en la misma fecha, llegó la variante Delta, responsable de un incremento de hospitalizaciones, y en el 2019 el Covid-19, que ha causado millones de muertes y enfermos en todo el mundo.
Es decir, que Covid y sus variantes, Delta y Omicron han hecho sus apariciones –pura coincidencia- al inicio de temporadas invernales, aunque las variantes del SARS-CoV-2 no han sido tan letales como Covid y la influenza.
Desde la aparición del Covid en el 2019, se habla muy poco del virus de la influenza o gripe, el cual hace su estrago para esta misma época devientos gélidos que bajan del norte, causando fuertes resfriados, millares de hospitalizaciones y muertes.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los EE.UU., así como la Organización Mundial de la Salud (OMS) han concentrado sus recomendaciones para contrarrestar los efectos negativos del virus del Covid y sus variantes, llamando a la vacunación masiva para evitar el contagio.
En los EE.UU. cerca de un 20% de la población se niega a vacunarse, y esto al parecer sigue complicando los esfuerzos para hacer desaparecer la pandemia, que afecta a todos,incluyendo los ya vacunados.
Sabemos que muchas personas se recuperan en una o dos semanas luego de infectarse del virus de la influenza o gripe, pero hay otros con baja defensa en su organismo, que son hospitalizados,muriendo muchos de ellos.
Los propios expertos de los CDC estiman que cada año, por culpa del virus de la influenza, son hospitalizadas entre 140 mil y 810 mil personas, de las cuales entre 12 mil y 61 mil mueren por este virus gripal, miles de niños incluidos.
Ante estos informes, está claro que el virus de la influenza sigue siendo una de las enfermedades virales más mortales en los EE.UU., afectando mayormente a mayores de 65 años y a los niños.