Raquel Arbaje compartió con las privadas de libertad, muchas de las cuales intercambiaron con ella el año pasado.
Santo Domingo.- La primera dama Raquel Arbaje visitó por segundo año consecutivo el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo Mujeres, para compartir con las privadas de libertad un momento festivo e intercambiar ideas sobre la comercialización de los productos que elaboran en los talleres del recinto y evaluar la ampliación de los cursos formativos en los que participan.
“Me alegra mucho poder estar nuevamente con ustedes en esta época en celebramos el nacimiento de Jesús, un acontecimiento que simboliza la humildad y la riqueza de corazón. Circunstancias adversas las han recluido en este centro, pero no determinan el curso de sus vidas ni las hacen perder el valor y la dignidad que las acompañará siempre como seres humanos y como personas”, expresó Arbaje.
En su conversación con las mujeres, la primera dama puso de relieve que si bien tanto ellas como los hombres en su misma condición deben resarcir a la sociedad por el daño infligido, el Estado tiene con ambos la obligación de crear las condiciones óptimas para su reinserción social y de garantizar el respeto a los derechos que no anula la sentencia condenatoria.
Al ponderar la calidad de los productos elaborados en los talleres de Najayo Mujeres, muchos de ellos confeccionados con material de reciclaje, planteó la necesidad de crear canales que faciliten su comercialización y exhortó a las empresas a considerar su adquisición como un estímulo a la economía circular.
Durante la visita, la primera dama entregó de manera simbólica a Rosanna de León Vicente, representante de las sesenta privadas de libertad que se encuentran en fase de prueba, un paquete con productos donados por diversas empresas respondiendo a la gestión realizada por el ministro de Industria, Comercio y Mipymes Víctor (Ito) Bisonó.
Tras la interpretación del himno nacional que dio inicio al acto, la privada de libertad Michel Evert tuvo a su cargo la oración inicial y las palabras de motivación a aprovechar las oportunidades de formación que brinda el nuevo modelo penitenciario.
La primera dama visitó el área materno-infantil del recinto para hablar con las madres que se encuentran en este lugar. Posteriormente, se trasladó al comedor para participar en el almuerzo preparado por el recinto y departir en un ambiente de camaradería con las privadas de libertad.
Arbaje se interesó también en los programas en que participan los hombres y mujeres del Centro Correccional de Najayo que han entrado en fase de prueba tras cumplir una parte de su condena. Esto implica participar en programas de formación en los talleres y posterior oferta de servicios.
Los programas de Najayo Hombres capacita para realizar trabajos en electricidad, plomería, pintura, carpintería, herrería, ebanistería, jardinería y limpieza y remozamiento de áreas públicas y privadas. En tanto que Najayo Mujeres habilita a las privadas de libertad en peluquería, textiles, manualidades, bisutería y repostería.
“Las empresas y los particulares harían una significativa contribución a la reinserción a la sociedad de estos hombres y mujeres si adquieren sus productos y servicios, que es también una manera de demostrarles el valor que tienen como personas”, concluyó Arbaje.
La primera dama estuvo acompañada de Roberto Hernández Basilio, director general de la Dirección Gral. De Servicios Penitenciarios y Correccionales; Hilda Patricia Lagombra Polanco, directora de Centros de Corrección y Rehabilitación; Noel Toribio, subcoordinador de Seguridad; Gaury Sisa, subcoordinadora de Asistencia y Tratamiento, encargada de Salud Física; Julio García, subdirector de Asistencia y Tratamiento; Arelys Uribe, directora de Najayo Mujeres, y María Peralta, presidenta del Ministerio Penitenciario Mamá Chicha.