Líderes y partidos políticos empujan a los dominicanos violentamente a una extemporánea campaña electoral
Actividades públicas, cambios de chaquetas, ofrecimientos extraordinarios y otras acciones propias de las semanas previas a las votaciones.
Para colmo, el presidente Luis Abinader parece dejarse arrastrar por el apresuramiento electoral y, aunque desde el inicio ha mantenido un dinamismo plausible, de repente el martes último anunció actividades en cinco provincias desde el día siguiente y hasta ayer domingo. Once en agenda para un solo día, jueves, que incluyeron palazos de inicio para construcción de una funeraria y la inauguración de un destacamento policial.
El Listín Diario contó 32 actividades en seis provincias entre domingo y viernes de la semana pasada. Figuraban “inauguración de la ampliación” de un aeropuerto, cementerios, reunión mototaxistas, anuncio de inversión para apoyo municipal con bacheos, recursos para bomberos, supervisión terrenos para construcción de plaza de toros, primer “rolazo” de “Pinta tu Barrio”. Algunas importantes, vinculadas a la generación de empleos.
Las acciones proselitistas arrancaron antes de que el gobierno del Partido Revolucionario Moderno cumpliera el primer año.
El Partido de la Liberación Dominicana, luego de 16 años corridos en control del Estado y de una ruidosa división y una apabullante derrota electoral, anunció la salida de aspirantes presidenciales con miras a las elecciones del 2024 para sofocar cuestionamientos y disgustos con la bulla de una campaña a destiempo y absurdos ofrecimientos y la esperanza del regreso al poder.
Esto pese a que importantes dirigentes peledeistas y familiares del expresidente Danilo Medina son investigados y guardan prisión por presuntos actos de corrupción.
La Fuerza del Pueblo que preside Leonel Fernández realiza actividades permanentes para ganar espacio político y atraer a los peledeistas desesperanzados. Con frecuencia presentan ingresos masivos de renunciantes de lo que definen el “viejo partido”.
La Junta Central Electoral y sectores de opinión han cuestionado las actividades masivas de los dos partidos, pero estos rechazan los cuestionamientos con el alegato de que son reuniones internas y organizativas. También argumentan que ya el PRM tiene candidato y señalan al presidente Abinader.
El PLD ya tiene aspirantes presidenciales en las calles: Margarita Cedeño, Abel Martínez, Francisco Domínguez Brito y Maritza Hernández. Recientemente se sumó Karen Ricardo, según anunció el secretario general de la organización, Charlie Mariotti.
En la Fuerza del Pueblo se da por descontado que nadie disputará la candidatura presidencial a Leonel Fernández, tres veces mandatario del país.
Los partidos medianos y pequeños examinan la correlación de fuerza de los grandes para definir caminos que les mantenga o acerquen al poder.
Un caso que ha llamado la atención es que la alcaldesa de San Juan de la Maguana, Hanoi Sánchez, quien abandonó el PLD para acompañar a Fernández fue postulada por una coalición, decidió madrugar y pasar formalmente al oficialista PRM, que le aportó la mayor cantidad de votos. La Fuerza del Pueblo denunció una ofensiva oficial en contra.
Hay versiones de que otros funcionarios municipales y congresistas podrían ir al partido de gobierno, lo que ha provocado acusaciones contra Abinader y el PRM, de que estimularían el transfuguismo.
Abinader, después de desencuentros con sus senadores y algunos disgustos con dirigentes del PRM por investigaciones y suspensiones de funcionarios por supuestos actos de corrupción, ha cohesionado sus tropas perrmeistas y parecería que asume el reto electoral tempranero.
Las mediciones diarias que parece pautan al gobierno de manera exagerada, podrían haber cambiado actitudes oficiales.
Ya estamos montados en la patana electoral, lamentablemente.
Se afecta la gerencia gubernamental y una seria labor opositora de contrapeso.