El PLD chantajea al gobierno de Luís Abinader y el PRM amenazando con movilizar a sus miembros para crear un estado de ingobernabilidad.
¿Quién dijo que Danilo Medina no puede ser sometido a la justicia? ¿Quién dijo que un ex presidente de la República no puede se interrogado sobre un hecho criminal o delictivo? ¿En que texto de la Constitución los ex presidente están exentos de ir a un tribunal o a una cárcel? ¿No que todos los ciudadanos son iguales ante la ley sin excepción de ningún tipo?
El Partido de la Liberación Dominica (PLD), no quiere justicia para los acusados de corrupción durante los ocho años que encabezó Danilo Medina alegando discriminación porque solo se investiga a los funcionarios de esos dos períodos, no los que encabezó Leonel Fernández y probablemente Hipólito Mejía.
El PLD chantajea al gobierno de Luís Abinader y el PRM amenazando con movilizar a sus miembros para crear un estado de ingobernabilidad terminando con la paz social y el equilibrio político que actualmente reina en el país. Se proponen una ruptura del orden democrático.
Dice el PLD que el ministerio público no es independiente, que actúa por mandato político, aunque no señala directamente al presidente Luís Abinader, que dicho sea de paso, se ha mantenido al margen de los procesos judiciales que se llevan a cabo desde la Procuraduría General de la República que encabeza la magistrada Mirian Germán, que durante unos 50 años se ha mantenido al margen de la política partidaria, que ha señalado en más de una ocasión, que no tiene vínculos con el presidente Abinader, que nunca la ha visitado ni le ha dado instrucciones en ningún sentido, algo que creo firmemente, conociéndolo a los dos.
Creo que las investigaciones tienen que abarcar los gobiernos que dirigió Leonel Fernández porque el entramado de corrupción del PLD comenzó en sus mandatos. Danilo no hizo más que ampliarlo llevándolo a su máxima expresión. Los gobiernos del PLD han sido los más corruptos de la historia del país. Durante los gobiernos del PLD la República Dominicana se convirtió en uno de los países más corruptos del mundo. Barcos y organismos internacionales dijeron que durante los gobiernos del PLD la corrupción se llevaba entre el 4 y el 5 por ciento del Producto Interno Bruto.
El PLD después que desfalcó el país no quiere que la justicia actúe, que sus corruptos no sean sometidos a la justicia, que los que se corrompieron y se enriquecieron con el dinero del pueblo no vayan al banquillo de los acusados y terminen en la cárcel. Quieren que se mantenga la impunidad, que volvamos al borrón y cuenta nueva.
El PLD dice que si la justicia toca a Danilo aquí habrá candela. Es un chantaje inaceptable que el presidente Abinader no debe permitir, al igual que la magistrada Mirian Germán, Yeni Berenice, Wilson Camacho y los demás integrantes del ministerio público. Tienen que continuar su trabajo sin miedo ni temor, caiga quien caiga. Que pase lo que tenga que pasar. Las amenazas del PLD son vientos que no tumban cocos. (No creo que tengan los cojones) El pueblo tiene que apoyar consecuentemente al presidente Abinader que ha dado sobradas muestras de ser un hombre transparente, honesto y trabajador, que se ha propuesto sanear el Estado convertido por el PLD en un antro asqueroso de corrupción. El que robó dinero del erario que pague su crimen en la cárcel, llámese como se llame, haya sido presidente de la República o no.
Danilo Medina debe ser investigado al igual que todos sus funcionarios, lo mismo que Leonel Fernández, incluso Hipólito Mejía que fue investigado, injuriado y calumniado sin poder hacerle un expediente, porque como ha dicho muchas veces, ni robó, ni mató, lo cual no significa que durante su cuatrienio no hubo corrupción; si la hubo pero no formó parte, ni la toleró.
Las pruebas en contra del ex presidente Medina, de sus parientes, de sus agentes de seguridad, etc., son abrumadoras, no pueden ser descalificadas por una bravuconada, ni por un chantaje absurdo que no asusta a nadie.