Pide dejar de lado la violencia y asegura que Trump es un expresidente "derrotado"
MADRID, 6 Ene. (EUROPA PRESS) – El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha conmemorado este jueves el primer aniversario del asalto al Capitolio que tuvo lugar el 6 de enero de 2021 a manos de una turba de seguidores del expresidente Donald Trump y que se saldó con cinco muertos, y ha acusado al magnate neoyorquino de haber puesto sus intereses "por encima de los del país".
En un discurso de media hora, Biden ha defendido los "valores fundacionales" de Estados Unidos y ha arremetido contra la amenaza que supone Trump y sus "violentos seguidores". "Por primera vez en nuestra historia, un presidente no solo perdió unas elecciones sino que intentó evitar la transferencia pacífica de poder mientras un grupo de violentos trataba de asaltar el Capitolio", ha aseverado.
"Pero fracasó. Ellos fracasaron. Y en este día debemos garantizar que ese ataque nunca vuelve a repetirse", ha manifestado antes de lamentado que el "ego sea más importante que la democracia o la Constitución". "No pudo admitir su derrota", ha recalcado.
Biden ha evitado en varias ocasiones hablar directamente de su predecesor en el cargo y esta vez no ha dicho su nombre, aunque se ha referido a él como "el expresidente". "Un expresidente ha creado una red de mentiras sobre las elecciones de 2020. Lo ha hecho porque valora el poder por encima de todo, porque ve su propio interés como algo más importante que el interés de Estados Unidos", ha lamentado.
Así, ha recordado que se presentó a las elecciones para luchar "por el alma" del país y ha advertido de que la democracia "está en peligro. Por ello, ha pedido a la población que luche por la ley y el orden, para "preservar la llama de la democracia".
"El expresidente y sus seguidores han decidido que la única manera de ganar es suprimir el voto y robar elecciones. Eso está mal, no es democrático. Y, francamente, tampoco es americano", ha insistido.
El actual inquilino de la Casa Blanca ha aprovechado la ocasión para agradecer a la Policía su labor durante la jornada de hace un año. "En este lugar sagrado la democracia fue atacada. La voluntad del pueblo fue asaltada. Nuestra Constitución sufrió amenazas", ha recordado.
Sin embargo, ha dicho, "la Policía del Capitolio, en minoría, hizo frente al brutal ataque junto a la Guardia Nacional, el Departamento de la Policía Metropolitana y otros altos cargos y funcionarios de Washington". "Nuestra democracia resistió. Prevalecimos", ha destacado.
Poco antes, la vicepresidenta, Kamala Harris, se dirigió a la nación y alertó de "cómo sería el país si las fuerzas que buscaron desmantelar la democracia hubieran tenido éxito". "Vimos la violencia, el caos", ha matizado.
"Cuando me reúno con gente joven siempre me preguntan cuál es el estado de nuestra democracia. Por culpa del 6 de enero. Lo que les digo es que ese día muestra la doble naturaleza de la democracia, su fragilidad y su fortaleza", ha añadido.