¿Qué tal si mañana la Procuraduría General, la Contraloría, la Cámara de Cuentas y todos los demás que quieran investiguen los hechos de corrupción de 1962 a esta parte, para no ir más lejos, ¿Tendríamos cárceles suficientes para acoger a tantos desfalcadores del erario? ¿Tendríamos los tribunales necesarios para condenarlos? Como es imposible todo eso, mejor castiguemos a los corruptos que estamos viendo en Najayo, o en sus casas con brazalete, y veamos qué pasa de ahora en adelante. (Porque escarmentar es la mejor forma de prevenir…Suponiendo que a partir de ahora, si no es mucho soñar, tengamos una Justicia independiente y seria).