La Fiscal General de Nueva York, Letitia James, llegó a un acuerdo de opiáceos de $26 mil millones con los tres principales distribuidores farmacéuticos del país: Cardinal, McKesson, y AmerisourceBergen, y Johnson & Johnson por el papel de las empresas en la creación y el fomento de la crisis nacional de opiáceos.
Desde el acuerdo de julio, que incluyó a 52 estados y territorios, miles de gobiernos locales de todo el país se han sumado durante el período de inscripción de la subdivisión. Nueva York ha asegurado la participación total de la subdivisión, lo que garantiza que Nueva York recibirá la cantidad máxima de $230 millones disponibles en virtud del acuerdo de conciliación, indica un comunicado de la procuraduría de Nueva York.
“Todas las regiones de Nueva York se han visto afectadas por la crisis de los opiáceos y cada comunidad ha quedado devastada a raíz de ella”, dijo la Fiscal General James. “Fuimos tras estos fabricantes y distribuidores porque deben pagar por su papel en esta crisis y por las vidas que han dañado para siempre” puntualizó la fiscal neoyorquina.
“Si bien ninguna cantidad de dinero traerá de vuelta a los neoyorquinos que hemos perdido trágicamente por los opioides, con la plena participación de todas las subdivisiones políticas de Nueva York, estamos haciendo todo lo posible para obtener la mayor cantidad de dinero posible para que nuestro estado lo ponga en tratamiento. y esfuerzos de prevención” agrego.
Junto con el fiscal general James, los fiscales generales de Carolina del Norte, Tennessee, California, Colorado, Connecticut, Delaware, Florida, Georgia, Luisiana, Massachusetts, Ohio, Pensilvania y Texas dirigieron las negociaciones de este acuerdo multiestatal.