Al excluir a Rusia del sistema SWIFT la banca de la UE se vería afectada porque no podría efectuar cobros y pagos internacionales con otras entidades que utilizan el sistema.
BRUSELAS, 25 Feb. (EUROPA PRESS) –
Los países de la Unión Europea han decidido aplazar la decisión de incluir el sistema de conexión de transferencias bancarias, SWIFT, del paquete de sanciones adoptado contra Rusia por el ataque a gran escala contra Ucrania, en el que sí se incluyen restricciones a bancos, al sector energético y financiero a las exportaciones, a la política de visados y sanciones personales contra el presidente ruso, Vladimir Putin, y el ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov.
"El objetivo es infligir daño a Rusia sin crear problemas sobre nuestros intereses. La exclusión del SWIFT afecta a nuestra financiación de las ONG que están trabajando en estos países. Es un análisis sistémico que tenemos que hacer", ha apuntado el ministro de Asuntos Exteriores de Portugal, Augusto Santos, ante los medios a la salida del Consejo Extraordinario de Asuntos Exteriores.
La opción de excluir a Rusia del sistema de conexión de transferencias SWIFT ha estado "sobre la mesa" durante el proceso de decisión de las sanciones que aplicará la UE, según ha explicado el ministro de Economía y Finanzas galo, Bruno Le Maire, tras una reunión con sus homólogos europeos en París.
Al excluir a Rusia del sistema SWIFT, que confirma las transacciones, su banca se vería afectada porque no podría efectuar cobros y pagos internacionales con otras entidades que utilizan el sistema.
La UE ha analizado cuáles serían las repercusiones de esta decisión de desconexión financiera de los Estados miembros con Rusia, ya que Moscú cuenta con un sistema homólogo para las transferencias con China, según apuntaron fuentes comunitarias, por lo que podría continuar realizando operaciones con el gigante asiático de forma normalizada y las repercusiones de esta decisión afectarían principalmente al mercado comunitario.