Viendo hacia Ucrania y lo que dice Putin (tan prepotente como todo jefe de toda superpotencia), me imagino lo que pasaría si mañana México o Canadá, países fronterizo con esta otra superpotencia, iniciaran, cada quien por su cuenta, negociaciones discretas o abiertas, para su beneficio económico y militar, en interés de sumarse al bloque militar de superpotencias que forman Rusia y China. ¿Qué podríamos esperar de quien ocupe la Casa Blanca y del bloque de potencias del Atlántico y más allá?…Bueno, la Invasión de Playa Girón de 1961, y lo de la crisis de los misiles de 1962, todo en Cuba, devendrían en motivos de risa.