En el marco de la implementación del Proyecto Manglares para el Desarrollo, liderado por el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales de la República Dominicana y otras organizaciones nacionales e internacionales.
Con el fin de reducir los riesgos climáticos y fortalecer la resiliencia social, ecológica y económica en los paisajes marinos costeros y la matriz terrestre adyacente en la provincia de Montecristi en la República Dominicana, el CATIE (Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza) ejecuta el Proyecto Manglares para el Desarrollo, junto a tres socios locales: AGROFRONTERA, ORC Consultores y la Universidad Autónoma de Santo Domingo, con financiamiento de la Iniciativa Internacional Climática (IKI), a través del Caribbean Biodiversity Fund (CBF).
Luego de recorrer la zona donde se desarrollarán las principales actividades, establecer acuerdos con los socios locales y comprender el contexto de los manglares de Montecristi, el equipo del proyecto reafirmó su compromiso de contribuir a disminuir la vulnerabilidad de los ecosistemas de manglar, los cuales cumplen importantes funciones para la protección de las costas y los medios de vida de las comunidades que tienen una alta dependencia de estos y subsisten en condiciones de pobreza y marginalidad.
En el marco de este proyecto, una misión del CATIE, encabezada por Pablo Imbach, líder de la Unidad de Acción Climática, en compañía de investigadores de su unidad y de la Unidad de Ganadería y Manejo del Medio Ambiente, visitaron la provincia de Montecristi para establecer mecanismos de comunicación y coordinación que garanticen la efectiva ejecución de las diferentes actividades que componen el proyecto, dentro de la gobernanza entre el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales de la República Dominicana (MIMARENA), el CATIE y los socios locales.
La misión permitió hacer avances importantes en temas como la identificación de los puntos críticos de restauración que serán atendidos, la selección de cadenas de valor que se intervendrán durante el proyecto, la implementación de las Escuelas de Campo en el tema de ganadería sostenible, así como la estrategia de comunicación e incidencia del proyecto mediante el impulso de una plataforma de gobernanza local para la restauración de manglares, que aglutine tanto a actores públicos como privados de la provincia de Montecristi.
Otto Cordero, punto focal del proyecto por parte del MIMARENA, y Alfredo Mena, representante del CATIE en el país, se mostraron muy complacidos con los acuerdos tomados para el cumplimiento de las metas del proyecto y los alcances que se podrán ver en el corto, mediano y largo plazo.