El primer ministro de Pakistán vuelve a acusar abiertamente a EEUU de organizar un golpe de Estado en el país
MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) – El primer ministro de Pakistán, Imran Jan, ha acusado este sábado por segunda vez a Estados Unidos en lo que va de semana de orquestar un golpe de Estado en el país a través de la moción de censura que la oposición le ha preparado y que será votada el domingo en la Asamblea Nacional en un momento álgido de tensión política nacional.
En una sesión televisada de preguntas y respuestas con la población, el primer ministro ha animado a sus simpatizantes, en especial los más jóvenes, a que salgan a la calle este fin de semana como muestra de apoyo; en particular el domingo, cuando se espera que más de 100.000 personas se concentren frente al Parlamento en lo que la oposición se teme que podría ser el principio de un "derramamiento de sangre".
"Esto no puede pasar y por eso digo a mis juventudes que no lo acepten, porque si fructifica esta conspiración para un cambio de régimen organizado por Estados Unidos, nos vamos a encontrar con el mayor crimen de la historia", ha declarado durante la comparecencia, recogida por GEO TV.
La conspiración. El primer ministro ha asegurado que la "conspiración" contra su gobierno está demostrada a tenor de la aparición hace unas semanas de una veintena de tránsfugas de su partido, el Movimiento por la Justicia de Pakistán o PTI, que declararon su intención de romper su disciplina de voto.
El país "no tendrá futuro" si la situación sigue avanzando de manera similar, según el primer ministro, antes de aconsejar a los jóvenes que realicen protestas "pacíficas".
Como en otras ocasiones, el primer ministro arremetió contra los grandes líderes de la oposición, como el responsable de la Liga Musulmana de Pakistán-Nawaz, el exprimer ministro Nawaz Sharif, y el copresidente del Partido Popular de Pakistán y expresidente del país Asif Ali Zardari, por introducir "prácticas corruptas" en la política paquistaní.
En este sentido, el primer ministro ha declarado que no tiene intención de "perdonar" a sus opositores, a los que llamó "traidores a la nación" y ha asegurado que "esta noche se decidirán medidas legales contra ellos".
Detalles. Las últimas semanas han estado marcadas por los escándalos de transfugismo y multitudinarias manifestaciones a favor y en contra del primer ministro, denunciado por la alianza opositora del Movimiento Democrático de Pakistán (MDP) como un títere del poderoso Ejército del país y responsable de un hundimiento económico nacional.
El mandatario y su partido, por contra, se declaran como víctimas de una campaña de persecución encabezada por antiguos líderes corruptos a los que está investigando por abuso de poder, entre ellos grandes iconos del MDP como Sharif o Zardari.
Intento de asesinato. Hasta tal punto ha llegado la situación que el Gobierno paquistaní informó este viernes de que reforzará las medidas de protección en torno a Jan después de que las agencias de seguridad del país identificaran esta semana un posible intento de asesinato contra el mandatari.
Jan denunció esta semana por vez primera a Estados Unidos pero finalmente acabó retractándose lo que no impidió el enfado del Departamento de Estado, que desmintió toda injerencia en el desarrollo de la política paquistaní.
Moción de censura. La moción de censura está más cerca que nunca de fructificar después de que el gran aliado del partido del primer ministro, el nacionalista Movimiento Muttahida Qaumi (MMQ), certificara su distanciamiento del Gobierno y pasara a respaldar la moción, tal y como anunció su líder, Faisal Subzwari.
Con este anuncio, el MMQ suma sus siete escaños a la alianza opositora, que contaría con 177 diputados a favor del cese del primer ministro, cinco más que la mayoría simple de 172 escaños necesaria para que prospere la petición.