Evo Morales afirmó que efectivos antidroga de amparar el narcotráfico en el Trópico de Cochabamba
La Paz, Bolivia, 6 Abr.- El exdirector de la Unidad Móvil de Policía para Áreas Rurales (Umopar) de Bolivia, el teniente coronel Erick Terán, ha acusado al comandante nacional de Umopar, el coronel Franco Arancibia, al director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), José María Velasco, y al viceministro de Sustancias Controladas, Jaime Mamani, de "proteger" a narcotraficantes en el Trópico de Cochabamba.
La acusación llega después de que el expresidente boliviano Evo Morales afirmara que efectivos antidroga amparan a narcotraficantes en la zona, en base a unos audios en los que presuntamente se escucha a Terán ordenar a agentes antidroga salir de un laboratorio de droga en medio de un operativo.
Terán ha afirmado que los arriba mencionados le ordenaron abandonar el operativo, que tuvo lugar en el Valle de Sacta. Así, ha interpuesto una denuncia ante la Fiscalía en contra de Arancibia por la presunta comisión de los delitos de cohecho pasivo, uso indebido de influencias, concusión, resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes e incumplimiento de deberes, según ha recogido el diario 'Los Tiempos'.
En su declaración, el teniente coronel ha contado que recibió "un montón" de llamadas de Arancibia, "ordenándole de manera compulsiva, nerviosa y con un tono amenazante" que salieran del lugar, el Valle de Sacta, "no tocar nada" y "no quemar nada". Según Terán la orden provenía del ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, y de Mamani. De igual modo, Velasco le dijo "en dos ocasiones" que se fuera de allí.
Tras el fallido operativo, Mamani pidió a Terán una reunión, a la que también asistieron Velasco y Arancibia. En el encuentro, según su declaración, le pidieron explicaciones por no hacer caso a la orden, a lo que el teniente coronel, que se declara "sorprendido" por la instrucción, respondió que "era su trabajo". Tras esto, fue apartado de la FELCN.
Según Morales, la supuesta "protección" a narcotraficantes busca implicar a los cocaleros del Trópico de Cochabamba, cuna política de su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS), con el narcotráfico.
Se trata de la segunda vez que Morales cuestiona la gestión de Del Castillo. La primera fue a mediados de marzo, cuando el exmandatario y los dirigentes cocaleros le pidieron presentar pruebas de una afirmación que hizo en un acto con cocaleros de Los Yungas. Concretamente, el ministro dijo que "hay gente, dirigentes y diputados, que se están llenando los bolsillos" con la producción de coca porque tendrían hasta ocho hectáreas de cultivos. Del Castillo será interpelado en la Asamblea Plurinacional de Bolivia por el comentario, a petición del MAS.
Estos comentarios generaron indignación en algunos sectores del gobernante MAS y, sobre todo, entre los cocaleros de Cochabamba. La Coordinadora de las Seis Federaciones del Trópico se reunió de emergencia días después, un evento en el que participó Morales. Allí se decidió dar un plazo de 24 horas a Del Castillo para que presentara pruebas de sus aseveraciones. Los Yungas es un sector cocalero opositor al Gobierno actual, que es aliado de los cocaleros de Cochabamba. Ambos están enfrentados.