La obra de la colombiana Patricia Fernández narra que entre 1989 y 1990, cada mes se mataba a un político o mandatario, o a cualquier otro que se atreviera a enfrentarse a los narcotraficantes.
ALMERÍA, 18 Jul. (EUROPA PRESS) – Círculo Rojo Grupo Editorial ha publicado la novela de ficción 'El dolor de la mentira' en el que la colombiana Patricia Fernández Lodoño se inspira en el "terror" del narcotraficante Pablo Escobar.
Evocando la historia de un niño que conoció hace más de 20 años, la autora habla sobre la "desolación y muerte" que sufrió Colombia durante la guerra entre Pablo Escobar y el gobierno colombiano, indica el sello de autoedición.
"La novela está inspirada en un chico que conocí hace veintitrés años, con mirada triste, y una víctima indirecta de la crisis económica en Colombia después de la muerte de Pablo Escobar", confiesa la autora en un comunicado.
Así, el lector "va a encontrar un viaje en el mundo de cada uno de los personajes". La novela parte de Pablo Escobar, quien tenía en jaque al gobierno colombiano y había tomado fuerza con el tráfico de droga.
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Muchos dirigentes políticos fueron acusados de trabajar mano a mano con el narcotráfico, el país había perdido el control. El año anterior, había hecho volar un avión en pleno vuelo. Hizo que mataran a Luis Carlos Galán, quien era candidato a la presidencia y líder del Nuevo Liberalismo.
Él estaba a favor de la extradición de narcotraficantes a Estados Unidos, y esa fue la razón por la que ordenó que lo mataran, pues era uno de los favoritos a la presidencia. Un árbitro de fútbol también fue asesinado.
Entre 1989 y 1990, cada mes se mataba a un político o mandatario, o a cualquier otro que se atreviera a enfrentarse a los narcotraficantes. Iván Fayad pensó que podría cabalgar solo.
Nacida en Colombia, Patricia Fernández Lodoño ha sido profesora de español y francés durante muchos años. Decidió vivir en Bélgica, donde encaminó su propósito de vida hacia el servicio de personas con problemas de depresión y estrés, también hacia personas con movilidad reducida.
Hace voluntariado en la Cruz Roja belga, impartiendo cursos de socorrismo para niños y para los adultos que se ocupan de ellos. Cuando descubrió que sufría fibromialgia, se orientó hacia el yoga, práctica que ha llevado a cabo en diferentes países durante 15 años.
