También lo acompañan ex compañeros de equipos en Boston.
COOPERSTOWN, Nueva York.- El dominicano David Ortiz se encuentra rodeado de familiares, amigos, fanáticos y muchos excompañeros de equipo de los Medias Rojas de Boston.
Este domingo es la ceremonia de exaltación al Salón de la Fama , para celebrarse en el Clark Sports Center de este pequeño pueblo del estado de Nueva York.
Su compatriota dominicano Pedro Martínez, el ex lanzador estelar se encuentra aquí por su condición de también miembro del Salón de la Fama.
Pero otros como Johnny Damon, Jason Varitek y el boricua-cubano Mike Lowell han venido con un solo objetivo: Ver entrar al Salón a “Big Papi”, con quien se coronaron campeones de la Serie Mundial como integrantes de los Medias Rojas en la década de los 2000.
“Por eso vas a ver a tantos aquí. Esto es una fraternidad. Lo mismo que aquí, con todos estos miembros del Salón de la Fama. Eso, lo que ocurre aquí, lo construimos en el terreno en nuestras carreras”.
Ortiz ha sido el centro de atención en Cooperstown en los últimos días, con fanáticos llegados desde la República Dominicana, el estado de Massachussets y muchos lugares más.
El ex toletero dominicano también ha promocionado una gran fiesta, el “Cooperstown Latin Fest” para celebrar después de la ceremonia de su entrada al museo de los inmortales del béisbol.
Como cuarto dominicano con placa en Cooperstown, Ortiz ya compartió el viernes con su “compadre” Vladimir Guerrero Sr. (exaltado en el 2018) y su “hermano mayor” Martínez (2015). Y por supuesto, le guarda una reverencia aparte al primer quisqueyano en el Salón, el exserpentinero Juan Marichal (1983).
“Don Juan fue básicamente quien nos abrió las puertas a Pedro, Vladi y ahora a mí”, dijo Ortiz, autor de 541 jonrones en una carrera de 20 temporadas en Grandes Ligas. “Es un gran honor tenerlo presente. Yo le digo ‘El Doctor’, porque es un ser humano tan grande. Todos lo queremos y agradecemos el trabajo que él ha hecho a través de los años, sobre todo empezando su carrera como dominicano”.