Los combates en Trípoli disminuyen en intensidad tras dejar al menos 23 muertos y 140 heridos
MADRID, 27 Ago. (EUROPA PRESS) – La situación en la capital de Libia, Trípoli, asolada tras casi 24 horas de combates entre milicias rivales, se ha relajado en las últimas horas, conforme va cayendo la noche en el país, mientras los hospitales atienden a las víctimas de unas hostilidades que han dejado, hasta ahora, al menos 23 muertos y 140 heridos, según el Ministerio de Salud del Gobierno de Unidad libio.
El Ministerio de Salud ha puesto en marcha un hospital de campaña dentro del Hospital Universitario de Tripoli para recibir a los heridos en los enfrentamientos de la capital, de los cuales 83 han recibido el alta en medio de la tensa calma que se respira, constatan fuentes de Libya Observer y Libia Eye.
Los combates entre la llamada Fuerza de Apoyo y Estabilidad, a las órdenes del Gobierno de unidad, contra milicias lideradas por Haitem Tajouri, se han saldado con la retirada parcial de estos últimos a lugares seguros después de que una emboscada final de las fuerzas de unidad lanzaran una emboscada que habría acabado con los principales cuarteles de la milicia en sus manos.
Se desconoce, por el momento, cómo está la situación a las afueras de la ciudad, donde se ha aproximado un convoy de las fuerzas del este del país, la administración paralela al Gobierno de Unidad.
La Corporación Estatal del Petrólero de Libia ha anunciado la suspensión de las operaciones durante las próximas 24 horas. De igual modo, el Ministerio de Educación también ha declarado la suspensión de los exámenes previstos para mañana hasta que se termine de estabilizar la situación en la capital.
Naciones Unidas, Estados Unidos, Reino Unido, la Unión Africana, Egipto y Turquía han implorado a las autoridades que se abstengan de tomar medidas que incrementen la violencia, mientras que el presidente del Consejo Presidencial de Transición, el organismo reconocido por Naciones Unidas para gestionar el proceso de transición en Libia, Mohamed Menfi, se ha visto obligado a adelantar el fin de su visita oficial a Túnez para volver de urgencia al país.
La reanudación de los enfrentamientos tiene lugar tras un breve periodo de relativa calma después de años de enfrentamientos abiertos por la muerte de Muamar Gadafi, el país se encuentra otra vez dividido en dos administraciones.
La Cámara de Representantes, con sede en el este del país, dio por finalizado el mandato de Dbeibé por el aplazamiento de las presidenciales de diciembre y acabó nombrando a Fazi Bashaga, en el inicio de un conflicto que se ha extendido al sector energético del país, absolutamente imprescindible para sostener la economía de una nación arruinada tras años de guerra civil.
Cabe recordar que Bashaga ha intentado tomar el control de Trípoli hasta en dos ocasiones — el 22 de julio, los enfrentamientos dejaron 16 muertos y alrededor de 50 heridos — antes de renunciar para evitar una lucha armada en firme. Ahora mismo su gobierno tiene su sede en la ciudad de Sirte, pero el primer ministro del este del país lleva días amenazando con llevar a cabo una ofensiva definitiva contra la capital.