La condena se dictó contra Adrián G. S., alias 'Plátano' y miembro de los trinitarios, por un delito de asesinato
La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado por primera vez a un miembro de una banda latina a prisión permanente revisable por el asesinato de un menor el 25 de septiembre de 2016 en Puente de Vallecas.
En la sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, se condena a Adrián G. S., alias 'Plátano' y miembro de los trinitarios, a dicha pena privativa de libertad por un delito de asesinato, otro en grado de tentativa y tenencia ilícita de armas. Se trata de la primera condena a esta pena en el ámbito de las bandas latinas en la Comunidad de Madrid.
A otros ocho procesados se les condena a penas de entre 15 años y seis meses de cárcel y cuatro años y tres meses de cárcel por delitos de asesinato intentado y tenencia ilícita de armas. A otros dos acusados se les pena solo por pertenencia a organización criminal.
El crimen del menor de 17 años tuvo lugar en una plaza de Puente de Vallecas cercana a la esquina entre la avenida de la Albufera y la calle del Puerto de Monasterio. Según las pesquisas, los acusados habrían planificado la agresión y de forma premeditada se acercaron a la plaza frecuentada por la banda de Los Ñetas provistos de armas blancas y otros objetos contundentes.
Se da la circunstancia de que en pleno juicio el presidente del tribunal ordenó el ingreso en prisión de siete de los nueve juzgados por la gravedad de los hechos. El primer día de la vista oral, se decretó el ingreso en prisión del cabecilla.
Además, y como ya sucediera en anteriores sentencias de la misma naturaleza, se decreta la disolución de la banda juvenil 'Los Trinitarios'.
Según el relato que expuso la Fiscalía durante la celebración de la vista oral y se recogía en su escrito de acusación, en septiembre de 2016, cuatro acusados, todos ellos miembros activos de la banda juvenil citada, estaban en las inmediaciones de la Plaza María Paz Unciti junto a las otras cinco personas procesadas.
Pese a que el grupo se dividía entre militantes activos de la banda y simpatizantes, la Fiscalía manifestó que todos ellos actuaban de mutuo acuerdo. Por lo que, cargados con machetes, cuchillos, navajas y botellas de cristal, se lanzaron hacia la banda rival, Los Ñeta "con absoluto desprecio hacia su vida e integridad física".
Según el Ministerio Público, lo hicieron de forma "organizada, rápida y sorpresiva" para evitar la capacidad de reacción de sus víctimas. Uno de los jóvenes de la banda rival, menor de edad, falleció a consecuencia de las puñaladas y otro resultó herido de gravedad.