El alto el fuego de 36 de duración se produce después de que el patriarca Kirill lo solicitara
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha ordenado este jueves que se establezca un alto el fuego de 36 horas con motivo de la Navidad ortodoxa después de que el patriarca Kirill, máximo representante de esta Iglesia, así lo solicitara.
"Teniendo en cuenta la petición del patriarca Kirill, insto al ministro de Defensa, Sergei Shoigu, a poner en marcha un alto el fuego en toda la línea de frente el 6 de enero a partir de las 12.00 (hora local)", ha indicado el Kremlin en un comunicado.
Así, Putin ha estipulado que la tregua permanecerá en vigor hasta las 00.00 del 8 de enero y ha señalado que la medida ha sido tomada "teniendo en cuenta el gran número de ciudadanos que profesa la religión ortodoxa y que viven en las zonas de combate".
"Pedimos a las autoridades ucranianas que declaren un alto el fuego y les permitan asistir a las celebraciones con motivo de la Navidad", que según la tradición ortodoxa se celebra el 7 de enero.
Horas antes, el patriarca Kirill pidió "a todas las partes implicadas en el conflicto que mantengan un alto el fuego y establezcan una tregua por Navidad desde las 12.00 horas del 6 de enero hasta las medianoche del 7 de enero para que la población ortodoxa pueda acudir a misa en la víspera de Navidad y el día del nacimiento de Jesucristo", tal y como ha señalado en la página web de la Iglesia Ortodoxa Rusa.
El anuncio, sin embargo, ha sido tildado de "elemento propagandístico" además de una "trampa cínica" por parte del asesor de la Presidencia de Ucrania, Mijailo Podoliak, en su perfil de la red social Twitter.
"La Iglesia Ortodoxa de Rusia no es una autoridad para la ortodoxia global y actúa solo como 'propagandista de guerra'. La Iglesia Ortodoxa de Rusia ha pedido el genocidio de los ucranianos, ha alentado los asesinatos en masa e insiste en una militarización aún mayor de Rusia", ha denunciado Podoliak.