De ellos 2,807 recibieron formación técnica a través de programas del Infotep y de Cenadarte.
Enfocado en el aspecto de la reinserción laboral, el sistema penitenciario fortaleció la relación con el Instituto de Formación Técnico Profesional (Infotep), en cuyos talleres, instalados en los propios centros penitenciarios, hay 2,807 internos participando en los diferentes programas, tanto de la citada institución como del Centro Nacional de Artesanía (Cenadarte).
Con más de seis mil personas privadas de libertad inscritas en planes de educación preuniversitaria y de alfabetización y la incorporación de 12 nuevas aulas-talleres para formación técnica, el sistema penitenciario dominicano cerró 2022 con un fortalecimiento de sus programas formativos.
De acuerdo con las memorias de la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC), los centros de privación de libertad inscribieron para el año lectivo 2022-2023 a 5,364 internos, 3,200 de ellos para educación básica y 2,164 para media, con el plan Prepara.
En paralelo al avance en el ciclo instructivo de estos estudiantes, 468 se alfabetizaron a través de los planes del Ministerio de Educación y de la “Escuela de Patio” del Club Rotario, para superar así los seis mil estudiantes en el nivel preuniversitario.
En su informe sobre el desempeño del año recién finalizado, la DGSPC resaltó que los capítulos de educación representan un pilar en los programas de tratamiento a las personas privadas de libertad, como base para el propósito de reinsertarlas a la sociedad de manera productiva.
Al respecto, la memoria institucional destaca que el Infotep ha impactado en 2,150 personas luego de la construcción de 12 talleres modulares en distintos centros, entre los que se destaca La Victoria, el recinto de mayor población penitenciaria.
Además, con la finalidad de propiciar la construcción del conocimiento a través de la comprensión de la literatura, la DGSPC conformó 57 círculos de lectura en los que participan 1,165 personas.
Durante 2022, año en que el sistema penitenciario amplió el alcance y cobertura de sus planes de educación, salud y deportes, el total de la población privada de libertad en todo el país promedió 27,500 personas.