El hecho de que una carrera universitaria se pueda iniciar y terminar con mayor rapidez, no implica que un tipo de conocimiento sea más fácil de dominar que otro.
Por Humberto Contreras Vidal
El primer día de clases pregunto a mis estudiantes universitarios ¿cuál es la carrera que estudian?. Cuando me contestan que estudian psicología, administración, derecho, comunicación, educación…y otras carreras humanísticas, inmediatamente les advierto que todas esas carreras abordan conocimientos más difíciles de entender que la química.
La mayoría de estudiantes, por no decir todos, se niegan en un principio a reconocer que una carrera como la psicología o la comunicación son áreas del conocimiento más difíciles de dominar que la química.
El hecho de que una carrera universitaria se pueda iniciar y terminar con mayor rapidez, no implica que un tipo de conocimiento sea más fácil de dominar que otro.
Por conveniencia se comparará la psicología con la química. La mayoría de personas están seguras que la química es un área más difícil de entender que la psicología. Esto es un gran error, por cuya razón se expondrá brevemente algunas evidencias teóricas.
Toda ciencia pretende conocer una realidad. La psicología como ciencia específica pretende conocer la realidad de la persona individual. Se trata de una realidad abstracta. Una realidad inmaterial que no podemos representar con átomos o moléculas. Una realidad tan especial, que nadie puede asegurar que la relación entre variables psicológicas, conducen siempre a un mismo resultado.
Los psicólogos pretenden corregir distorsiones mentales. Distorsiones que sólo existen en único ser humano y que, sin embargo, implican un mundo de situaciones. De ahí que se diga que cada cabeza es un mundo. Quizás, el filósofo griego Sócrates fue consciente de ello, y por eso adoptó la frase “Conócete a ti mismo y conocerás al mundo que te rodea”.
La diversidad de problemas asociados a la salud mental, parece ser comparable con la diversidad de situaciones que se presentan para conocer el universo.
La química intenta describir el universo conocido con poco más de cien elementos químicos. Mientras que la psicología pretende describir y conocer el universo mental no sé con cuántos elementos o variables psicológicas. Lo que sí sé es que cada ser humano es un universo independiente. En consecuencia, habrá tantos universos mentales por conocer como personas existan en el planeta tierra.
Imagínese usted el alto nivel de complejidad si se decidiera hacer una base de datos que describiera el comportamiento psicológico de cada persona en el planeta. Sin lugar a dudas, que sería una tarea imposible de llevar a cabo en la práctica. Y conforme a lo antes expuesto, imposible de realizar, a la luz de los conocimientos científicos acumulados hasta el Siglo XXI.
Quizás, colocar una descripción psicológica fiable de una sola persona en la base de datos de ficción señalada en el párrafo anterior sea una tarea imposible de cumplir.
En otro orden, por su naturaleza, la psicología es una ciencia que además de la complejidad planteada está afectada por el cambio constante propio de las ciencias humanísticas. Se trata de que cuando se logra describir -conocer- lo suficientemente una realidad, esa realidad es cierta en ese momento. Y al paso del tiempo dicha realidad va cambiando por lo que el conocimiento deja de corresponderse con la realidad (la verdad). Un hecho, que de seguro ha sido tomado en cuenta por la corriente de pensamiento que plantea la imposibilidad de conocer (escépticos).
Por el contrario, la química como ciencia natural tiene un objeto de estudio cuyo conocimiento permite ser dominado con mayor facilidad. Basta con conocer un número finito (poco más de 100) de elementos químicos y unas normas que no varían para explicar cómo se unen y se forman diferentes tipos de materiales.
El conocimiento químico permite predecir comportamientos con un cien por ciento de certeza. Cuando el hidrógeno se une al oxígeno en determinadas condiciones siempre se produce agua. Mientras que, cuando un hombre encuentra a su esposa en un acto de infidelidad, su comportamiento es impredecible. En general, el conocimiento psicológico difícilmente podrá predecir con certeza el comportamiento particular de una persona ante un hecho en igualdad de condiciones.
De aquí que, resolver problemas de la química y de las ciencias naturales en general; es y será más fácil que resolver problemas de psicología y de las ciencias humanísticas y sociales.
¡Qué emocionante es vivir con la conciencia que te dan los conocimientos básicos de la Química!
El autor es doctor en ciencias químicas, residente en Santiago de los Caballeros. [email protected]