“El caso debe llamar a reflexión a toda la sociedad " manifestó Victoria Yeb
Santo Domingo.- El senador por la provincia María Trinidad Sánchez, Alexis Victoria Yeb, ha condenado hoy a los sectores que buscan sacar provecho de la tragedia del niño que murió trágicamente durante el carnaval de Santiago.
En este sentido, el legislador ha enfatizado, además, que los referidos grupos intentan aprovecharse de la trágica situación para generar algún beneficio.
“Quisiera llevar a una reflexión a algunos colegas que han visto esta desgracia que ha indignado al pueblo dominicano y esos videos que traen mucha nostalgia para sacarle provecho político”, precisó el senador, quien entiende que esta acción no debería de suceder.
Victoria Yeb ha afirmado que en este trágico suceso intervienen múltiples factores. Por un lado, la mala preparación de los agentes del orden y, por el otro lado, la actitud de irrespeto que toman algunos ciudadanos frente a miembros de la Policía Nacional.
“En ese video se refleja lo que es la sociedad dominicana, donde un policía a lo mejor mal preparado y unos ciudadanos que no respetan la policía”, ha añadido.
El senador también ha expresado la necesidad de que la sociedad dominicana reflexione ante tragedias como estas para que tome conciencia y respete la autoridad y que, por su parte, los policías deben ser más capacitados al momento de actuar en momentos donde un ciudadano viola la ley.
“Este caso debe llamar a reflexión a toda la sociedad antes policías necesitan mejor preparación y ciudadanos que no respetan a la autoridad“, ha puntualizado Victoria Yeb.
En este orden, el legislador ha expresado que situaciones como estas dan paso a la reflexión para evitar que vuelvan a ocurrir.
“Esta desgracia tiene que llevarnos a reflexionar qué es lo que uno quiere como país”, ha destacado para luego calificar este hecho como una tragedia tanto para la familia de la víctima como para los familiares de la policía.
El hecho se produjo pasadas las 5:00 de la tarde del domingo pasado, luego de que se generara una discusión entre el padre del niño Donelly Martínez y una patrulla de la Policía Nacional, por el volumen de la música de un vehículo.